WASHINGTON. Donald Trump reestructuró su equipo de campaña y puso al frente de ella al directivo de un medio conservador conocido por defender el estilo provocador del magnate, que deja claro así que busca seguir siendo fiel a sí mismo.

 

La remodelación se produce cuando faltan menos de tres meses para las elecciones del 8 de noviembre y en un momento en que la mayoría de los sondeos de intención de voto, tanto a nivel nacional como en estados clave, dan ventaja a la candidata presidencial demócrata, Hillary Clinton, frente a Trump.

 

El magnate ha nombrado a Stephen Bannon, ex banquero y directivo del portal de noticias conservador Breibart News, como jefe ejecutivo de su campaña.

 

Mientras, la campaña destacó que estos cambios llegan en un momento de “crecimiento significativo”, con la primera “gran compra” de anuncios de televisión para las elecciones de noviembre, que comenzarán a emitirse a partir del viernes en estados cruciales como Florida, Ohio, Carolina del Norte y Pensilvania.

 

Bannon, sin experiencia previa en campañas políticas, ha defendido desde Breibart bde Trump y no se ha mordido la lengua a la hora de criticar a figuras del aparato del Partido Republicano como el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan.

 

Provocador al igual que Trump, su contratación ha sido interpretada como una señal de que los constantes enfrentamientos del magnate con los medios de comunicación que siguen su campaña van a continuar e, incluso, pueden empeorar.

 

Paul Manafort, actual jefe de campaña de Trump, continuará en el equipo, pero no se ha informado de cuáles serán sus nuevas responsabilidades.

 

Los cambios llegan apenas dos días después de que Manafort fuera acusado por el diario The New York Times de recibir durante 6 años casi 13 millones de dólares procedentes de un partido prorruso en Ucrania.

 

Con esta reestructuración, Trump pretende dar un impulso a su campaña y recuperarse de su bajada en las encuestas de intención de voto, donde hoy Clinton le saca una ventaja de seis puntos (47.2% frente a 41.2%), según el promedio diario que elabora la web RealClearPolitics.

 

La caída en los sondeos se ha producido a raíz de una serie de polémicas protagonizadas por el magnate, como su enfrentamiento con los padres musulmanes de un soldado fallecido en Irak o su afirmación de que el presidente de EU, Barack Obama, es el “fundador” del grupo yihadista Estado Islámico.