La suerte está del lado de Andrés Manuel López.

 

Todos los números le favorecen.

 

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Aspiraba a ser contrapeso del PRD en la capital y tendrá el control de la Asamblea Legislativa.

 

Buscaba al menos dos delegaciones clave -la populosa Iztapalapa y el corazón político de la capital, Cuauhtémoc, para desde ahí someter a los gobiernos federal y capitalino- y administrará cinco.

 

Su Juanita Clara Brugada se quedó en el camino, pero no Ricardo Monreal, a cuyo cargo estará la jurisdicción más rica de la Ciudad de México y sede de los poderes federales.

 

Si El Peje está exultante, la preocupación debe ser del presidente Enrique Peña y del jefe de Gobierno, Miguel Mancera.

 

La Cuauhtémoc estará a disposición de las causas populistas del tabasqueño y adversarios de Peña y Mancera, como la CNTE, el SME, los Panchos Villa y hasta la guerrilla.

 

Será el regreso a los tiempos en los cuales la Plaza de la Constitución era terreno de comercio donde los negociantes eran tres: el señor López, Manuel Camacho y Marcelo Ebrard.

 

PRIMERA META: DISMINUIR MÁS A LOS CHUCHOS

 

Pese a ese éxito, Andrés Manuel López no se da por satisfecho.

 

Quiere más.

 

En espera del resultado de las impugnaciones –no se resiste, por ejemplo, a quedarse sin esa carne de campaña radicada en Iztapalapa–, ya elabora su siguiente acción:

 

La seducción.

 

Utilizará sus poderes de caudillo para despojar de cuadros importantes a otros partidos a fin de fortalecer sus bancadas, la surgida de elecciones en la Cámara de Diputados y previsible en el Senado.

 

Ya lo dijo a los suyos:

 

–Comenzaremos con 34 o 35 diputados, pero a la vuelta de los meses tendremos al menos el doble.

 

O tal vez más:

 

–Necesitamos ser la segunda fuerza parlamentaria y vamos a serlo.

 

El primer blanco de esa pepena parlamentaria es el perredismo.

 

Clientela hay: de un lado están militante de tribus abiertamente opuestas a Los Chuchos, pero también simpatizantes de Jesús Ortega, Jesús Zambrano, Carlos Navarrete, Graco Ramírez, Guadalupe Acosta Naranjo

 

Se irán con El Peje con promesas de proyección para las siguientes elecciones, cuando él aspira a convertirse por fin el presidente de la república.

 

Y cuando él llegue a la recámara de Benito Juárez en Palacio Nacional tendrán la recompensa: posiciones, ingresos, negocios, proyección.

 

Esta estrategia ya está en marcha.

 

MADERO SE FORTALECE ANTE EL CALDERONISMO

 

1.- El maderismo se fortalece para las inminentes noches de cuchillos largos.

 

Tiene todo a favor: Gustavo Madero controla los órganos del PAN y el calderonismo está disperso pese al triunfo de dos afines a Ernesto Cordero, Carlos Mendoza y Francisco Domínguez.

 

Madero lo sabe y, tras cuentas muy precisas, no duda en seguir adelante: él coordinará el grupo parlamentario azul en San Lázaro luego de entregar a Ricardo Anaya la presidencia del partido.

 

2.- Miguel Mancera optó por encomendar su manejo de imagen al periodista Julián Andrade, cuya encomienda es doble: estrategia y difusión día a día.

 

Suerte.

 

3.- El general Salvador Cienfuegos celebró en familia su cumpleaños, aunque sí invitó a parte del Estado Mayor de la Defensa Nacional.

 

4.- El gobierno recibió ayer desde el Senado una expresión de apoyo a la reforma educativa.

 

Si bien su instrumentación es compleja y enfrenta obstáculos, es un mandato de ley y por ello Ejecutivo y Legislativo actuarán unidos, prometió el coordinador Emilio Gamboa.

 

5.- Poco se ha dicho, pero los candidatos panistas fueron apoyados por el gobernador poblano Rafael Moreno Valle, quien así ganó adeptos.

 

También se fortaleció con el doble de victorias de hace tres años.

 

Y 6.- El PRD capitalino no se resigna a perder Miguel Hidalgo.