Este lunes dio inicio la recepción de solicitudes para el pago del seguro de depósito de los ahorradores de la Sociedad Financiera Popular (Sofipo) Ficrea, disuelta y liquidada tras detectarse operaciones fraudulentas y triangulación irregular de fondos.

 

De acuerdo con información de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), en una primera etapa, la recepción de estas solicitudes se hará en seis sucursales ubicadas en la zona metropolitana de la Ciudad de México; de Guadalajara, Jalisco; y de Saltillo, Coahuila.

 

Se estima que dos mil 500 (42%) de los seis mil 800 ahorradores en Ficrea recibirán la totalidad de sus depósitos, mientras que el resto (cuatro mil 300) recibirán un máximo de 131 mil pesos en la primera etapa.

 

El seguro de depósito aplicable a las Sofipos cubre un máximo de 25 mil Unidades de Inversión (Udis), aproximadamente 131 mil pesos, por lo que quienes tengan depósitos mayores recibirán el monto proporcional que les corresponda de la liquidación de Ficrea.

 

Adicionalmente, el gobierno federal, a efecto de procurar el mayor valor de la recuperación de los activos, instrumentará un esquema bajo el cual la cartera y demás activos de la Sofipo se harán líquidos en el menor tiempo posible.

 

El 7 de noviembre pasado, la CNBV decretó la intervención gerencial de Ficrea derivado de distintas irregularidades que ponían en riesgo a los usuarios, lo que permitió detener operaciones fraudulentas y frenar un mayor deterioro de los activos.

 

Tras el trabajo realizado por el interventor, conjuntamente con la CNBV, se identificó y documentó que Ficrea llevaba a cabo operaciones fraudulentas a través de por lo menos tres empresas relacionadas: Leadman Trade, Baus&Jackman Leasing y Monka Comercial, en las cuales el socio principal es Rafael Olvera Amezcua, también dueño de Ficrea.

 

Del total de la cartera de crédito de Ficrea, que a octubre de este año era de seis mil 284 millones de pesos, se transfirieron a empresas relacionadas cinco mil 900 millones de pesos, pero sólo se pudo constatar la integración de expedientes de arrendamiento por tres mil 200 millones de pesos.

 

El resto de los recursos, aproximadamente dos mil 700 millones de pesos, se utilizó de distintas formas: transferencias al extranjero, compra de bienes muebles e inmuebles de uso no relacionado con la Sofipo, así como gastos personales de socios, lo cual es investigado por la Procuraduría General de la República (PGR) y autoridades correspondientes.

 

Además del desfalco por casi dos mil 700 millones de pesos, se documentaron otras irregularidades, las cuales generaron la imposibilidad de que la Sociedad se mantuviera en operación y la hacen inviable.

 

Con esta información sobre Ficrea, a la cual previamente se le habían suspendido las operaciones, el pasado 19 de diciembre la CNBV determinó su disolución y liquidación, y le revocó la autorización para operar como Sofipo.

 

Con la información recabada durante el proceso, se presentaron las denuncias correspondientes ante la PGR por las probables conductas delictivas, instancia que a su vez realiza las investigaciones que ameritan.

 

Las autoridades financieras anunciaron que a partir de este lunes 22 de diciembre, a través de seis sucursales de la Sofipo en distintas ciudades del país, se iniciaría la recepción de solicitudes por parte de los ahorradores para recuperar sus recursos.

 

A partir de la recepción y validación por parte de la institución, el Fondo de Protección resolverá respecto a la procedencia de a solicitud, a efecto de realizar los pagos correspondientes conforme a la ley.

 

“La prioridad de la resolución de Ficrea es pagar a todos los ahorradores el seguro respectivo y establecer los mecanismos que generen el mayor beneficio para los ahorradores”, subrayó la CNBV.

 

En declaraciones a Notimex, el presidente de la CNBV, Jaime González Aguadé, informó la víspera que se trabaja en la integración del proceso para monetizar los recursos desviados para el uso personal de Olvera Amezcua, a quien señaló como responsable del fraude en Ficrea.

 

Este proceso, explicó, se llevará a cabo a través de la banca de desarrollo y se prevé que Nacional Financiera (Nafin) compre la cartera y los bienes inmuebles mediante el otorgamiento de un crédito para que la Sofipo tenga recursos líquidos y así empiece a pagar a los ahorradores con más de 131 mil pesos.

 

El proceso consiste en crear un fideicomiso en la banca de desarrollo para depositar ahí la cartera y bienes inmuebles rescatados, monetizarlo con un préstamo y, posteriormente, la institución de fomento realizará la venta de los mismos, con lo cual recuperaría el crédito.

 

En sus páginas en Internet, la CNBV, Ficrea y la Condusef informan sobre los requisitos para la presentación de las solicitudes, así como la ubicación de las sucursales abiertas y la apertura de nuevas sucursales.

 

GH