El Senado de la República hizo un nuevo llamado al Gobierno federal para que destrabe los convenios 156, 183 y 189, que hizo con la Organización Mundial del Trabajo (OIT), orientados a mejorar las condiciones laborales de las mujeres y abatir la discriminación, y los envíe a esta soberanía para su ratificación.

 

La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, Angélica de la Peña Gómez, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), lamentó que el Gobierno mexicano suscribió los acuerdos pero ha bloqueado su ratificación en el Senado.

 

En entrevista con 24 HORAS, la legisladora recordó que el Gobierno federal mantiene en suspenso la implementación de diversos tratados relativos a los derechos humanos y la protección de los derechos laborales que no pueden ser postergados.

 

“Hay muchos tratados internacionales que todavía no aprobamos. Preocupa mucho por ejemplo, el convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo sobre los trabajadores del hogar, junto con eso también está el convenio 156 y el convenio 183, es decir tenemos mucho en lo que seguir trabajando”, criticó.

 

El convenio 189, relativo al trabajo digno para las trabajadoras y trabajadores del hogar, fue aprobado por nuestro país el 16 de junio de 2011 y a cuatro años no se ha puesto en marcha.

 

“Estamos obligados a revisar cuáles tratados internacionales en materia de derechos humanos, en materia laboral, no han sido armonizados en nuestra legislación”, señaló Angélica de la Peña, tras advertir que la Cámara alta seguirá insistiendo en la necesidad de garantizar la implementación de dichos convenios.

 

Otro convenio pendiente es el 156 referente a igualdad de oportunidades entre trabajadoras y trabajadores con responsabilidades familiares, que implica el reconocimiento al rol que juegan mujeres y hombres en la distribución del trabajo productivo y reproductivo.

 

También se mantiene pendiente el 183, relativo a la protección de la maternidad, que constituye un marco de protección a nivel internacional para todas las mujeres empleadas,  ya que en él se consignan derechos fundamentales como la protección a la salud, licencia antes y después de la maternidad, prestaciones sociales, protección al empleo y a la no discriminación.

 

Según lo señaló la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos en el Senado, la ratificación de esos convenios representaría un avance importante en el reconocimiento de los derechos del trabajo que realizan las mujeres, así como en la igualdad de género en el ámbito laboral.