Condicionar la aprobación de una reforma por otra, desacuerdos entre líderes de partidos y el gobierno federal y presiones de las corrientes internas de los institutos políticos para abandonar el acuerdo, forman parte de los problemas que han permeado al Pacto por México desde su firma, en diciembre pasado; sin embargo, la reforma fiscal recién aprobada por el PRI y PRD acabó por sepultar este convenio político.

 

Acción Nacional advierte riesgos. Su líder, Gustavo Madero, declaró que el gobierno tomó su decisión política al diseñar los impuestos con una visión cercana al “filo perredista”, dejando fuera de la negociación a los legisladores blanquiazules.

 

“El presidente Enrique Peña Nieto tomó la decisión de hacer una propuesta filo-perredista, ¿qué quiere decir esto?, con los conceptos, los términos y las propuestas del PRD, es algo que de inicio tomó la decisión, escogió el aliado con quien procesar esta reforma y obviamente dejo al PAN en contra”, declaró el panista durante una gira a Monterrey.

 

Esta decisión, tomada en el acuerdo PRD-PRI-Ejecutivo federal, maltrató y acabó por desilusionar al panismo mexicano. Madero aseguró que con Pacto o sin Pacto las reformas pendientes en materia político-electoral y energética tendrán que salir adelante.

 

“Esta reforma político-electoral, con Pacto o sin Pacto, hace falta, una reforma energética con Pacto o sin Pacto le urge a México, entonces la pregunta es cómo vamos a procesar esta reforma político electoral y esta reforma energética en cualquier formato, pero para que puedan salir a la brevedad”, cuestionó el dirigente de Acción Nacional a sus opositores.

 

La agenda de temas sigue pendiente con la reforma político-electoral y energética, pero para los panistas se abordarán estos temas en cualquier formato –aunque sea fuera del Pacto por México- para que sean discutidos y aprobados.

 

Los embates

 

 

Para el líder del PAN, desde la firma del Pacto en diciembre de 2012, este acuerdo ha sufrido embates.

 

Los amagues de salirse del acuerdo comenzaron en las filas del PRD. A principios de agosto de este año, diversas corrientes perredistas presionaron a su dirigencia nacional para que salieran del convenio político. En un Consejo Político Nacional se decidió –convencidos por la corriente Nueva Izquierda o de Los Chuchos– de que el Partido de la Revolución Democrática (PRD) debía seguir dentro del Pacto por México.

 

Otra embestida, fue la que se produjo cuando se gestaba la reforma educativa. No obstante, a inicios de septiembre, las principales fuerzas políticas y Enrique Peña Nieto consiguieron tomar oxígeno al presentar una propuesta de consenso.

 

La gota que derramó el vaso fue la negociación por la reforma fiscal fraguada entre PRD y PRI, encabezados por el Ejecutivo federal. Los panistas se negaron a aprobar argumentando que “se van sobre los contribuyentes cautivos y sobre ese les aumentan más la recaudación y las contribuciones”, además de la homologación del IVA en los estados fronterizos del país, que va de 11 a 16%, entre otras medidas.

 

“Bueno, el Pacto por México ha estado amenazado de muerte desde su concepción, es un Pacto que todos los días sufre embestidas, es el Pacto es una acuerdo político y el día a día afecta, contamina, lastima a estos acuerdos”, declaró Gustavo Madero.

 

La agenda de temas, según Acción Nacional, es desahogar primero el tema político-electoral y después la reforma energética, ambos temas en este periodo ordinario de sesiones en el Legislativo.

 

Senador vota contra sus propias iniciativas

 

El 27 de noviembre de 2012, los senadores priistas Óscar Román Rosas y Raúl Aarón Pozos firmaron y presentaron ante el pleno una iniciativa que buscaba que 27 municipios, de diversos estados, formaran parte de los beneficios del IVA del 11%, entre los que destacaban dos ayuntamientos de Campeche, su estado: Candelaria y Calakmul.

 

La iniciativa no prosperó.

 

Sin embargo, casi un año después, la madrugada del miércoles, los mismos dos legisladores votaron en contra de su propia propuesta, pues apoyaron la homologación del IVA en las zonas fronterizas.

 

Por su parte, los también legisladores de ese estado, el panista Jorge Luis Lavalle, y la Senadora Layda Sansores, de Movimiento Ciudadano, votaron en contra de dicha medida. El primero había tomado como bandera la posibilidad de que dichos municipios entraran en los beneficios que otorgaba pagar un 11% y no el 16% que se paga en el resto del país que no es frontera.

 

Con la homologación del IVA en las fronteras, aprobada ya en el Congreso de la Unión, a partir del próximo año estas zonas dejarán de pagar una tasa preferencial de 11% en este gravamen y tendrán que pagar 16% como el resto del país.

 

En su momento, Pozos Lanz defendió la iniciativa de incluir a su estado en el IVA preferencial que, a su consideración, había sido planteada en primera instancia por los senadores priistas.

 

En una entrevista concedida  por el legislador priista destacó: “confiamos en que pase primero al Senado y luego en la Cámara de Diputados federales, porque tenemos el apoyo de varios senadores, así como firmada y respaldada por el presidente de la Comisión de Desarrollo Regional, René Juárez y el presidente de la Comisión de Frontera Sur, Humberto Mayans”, quienes también, esta semana votaron a favor de la homologación del IVA.

 

Así, en el caso particular de Campeche, sus dos senadores priistas votaron en contra su propia iniciativa, aquella que hace un año habían presentado para que gozarán del beneficio de pagar el 11% de IVA y no el 16%.