Tres días después del enfrentamiento entre pobladores y la Policía militar, los habitantes de Palmarito Tochapan, junta auxiliar de Quecholac, recibieron cuatro cuerpos más de las siete personas fallecidas tras el operativo.

 

Ayer sepultaron a dos pobladores abatidos durante la refriega registrada la noche del miércoles.

 

Durante una misa en la iglesia de la comunidad llevada a cabo este domingo, los dolientes insistieron en que sus familiares no eran ladrones de combustible sino campesinos y aseguraron no defender a los huachicoleros.

 

En el lugar permanecen mantas desde el acceso a la población hasta la presidencia auxiliar, donde piden que no ingrese la Policía ni el Ejército.

 

Las actividades de la localidad se llevan a cabo con normalidad, sin presencia de personas armadas o elementos de la Sedena o de la Policía estatal.

 

aarl