El Partido Revolucionario Institucional (PRI) exigió “un castigo ejemplar” para el ex gobernador panista de Sonora, Guillermo Padrés, acusado de delincuencia organizada, defraudación fiscal y operaciones con recursos de procedencia ilícita por un monto superior a los 8 millones de dólares.
“Exhortamos respetuosamente a las autoridades federales, a que redoblen sus esfuerzos para la aplicación de las sanciones que correspondan al panista”: expresó el partido que lidera Enrique Ochoa a través de un comunicado.

 

También exigieron a la Procuraduría General de la República (PGR), que actué con todo rigor y además de llevar al ex gobernador de Sonora a prisión, le sean incautados sus bienes para reintegrarlos al pueblo de Sonora.

 

Finalmente, reprobaron que el ex mandatario estatal acuda ante las autoridades un año después de que concluyó su mandato en Sonora, tiempo durante el cual solicitó decenas de amparos para evadir las órdenes de aprehensión giradas en su contra; y criticaron su estrategia de “victimizarse” y presentarse ante la opinión pública como “un perseguido político”.

 

“Es lamentable que la defensa del ex gobernador de Sonora sea victimizarse (…) Para el PRI, es claro que se le cerraron todos los espacios para su fuga e intenta victimizarse con esta estrategia mediática orquestada desde las más altas esferas del panismo”. Estéfana Murillo