Luego de que mantuvo un paro laboral de 116 días, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) aseguró que ganó la batalla más reciente contra la reforma educativa, y como prueba, asegura que la Evaluación Magisterial de 2016 será voluntaria, afirmó el dirigente de la Sección 9 de la Ciudad de México, Enrique Enríquez Ibarra.

 

Durante la inauguración del Segundo Foro Hacia la construcción del proyecto de educación democrática, el líder de la Sección 9 comentó que en los hechos la reforma educativa está congelada, pero esto no significa el fin del movimiento magisterial, sino el pase a otra etapa.

 

“Antes ni un ápice se podía mover, todo estaba perfecto. Hoy hemos convencido a muchos compañeros de esta realidad, hoy la evaluación es voluntaria, por lo menos, con la fuerza que tenemos podemos mantener esta parte”.
Acompañado de maestros de Michoacán, Guerrero, Chiapas, Oaxaca y la Ciudad de México, además de líderes sindicales de Canadá, Brasil, Panamá y Chile, Enríquez reiteró la postura que la CNTE apoya desde 2013, que la reforma educativa “es una farsa”.

 

“Es simplemente una reforma laboral para mantener el control político, el control de los trabajadores, cómo administrar las plazas, cómo convertir la gran carrera que es el magisterio en un simple empleo”.

 

En el evento de inauguración del foro también habló Teres Garduño, integrante del grupo académico que asesora a la CNTE para el diseño de un nuevo modelo educativo, quien aseguró que a lo largo de estos meses se demostró el apoyo de la sociedad al movimiento magisterial.

 

“(La reforma educativa) tiene un rechazo evidente, la comunidad, los padres de familia, salieron a las calles a mostrar su apoyo a la CNTE como nunca se ha hecho a favor de otro movimiento”, aseguró.