Foto: Especial “Agradezco el apoyo de Héctor Larios y de los gobernadores a la vez de hacer un llamado a quienes han expresado su interés de participar en la elección interna"  

Dos semanas después de haber presentado su fórmula para luchar por la dirigencia nacional del Partido Acción Nacional (PAN), el ex senador Héctor Larios y el ex gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle se unieron a la candidatura de Marko Cortés.

Además, los gobernadores Martín Orozco, de Aguascalientes; Carlos Mendoza, de Baja California Sur; José Rosas Aispuro, de Durango; José Antonio Gali, de Puebla y la gobernadora electa de esa entidad, Martha Erika Alonso; Francisco Domínguez, de Querétaro; Carlos Joaquín, de Quintana Roo; Francisco Cabeza de Vaca, de Tamaulipas y del gobernador electo de Yucatán, Mauricio Vila, respaldaron las aspiraciones de Cortés para dirigir el partido.

Antes, los mandatarios de Baja California, Francisco Vega; Miguel Ángel Yunes, de Veracruz, y el recién electo Diego Sinhué Rodríguez, de Guanajuato, ya habían anunciado su apoyo al ex diputado.

Cortés pertenece al grupo Anaya, y es visto como la continuación de la actual dirigencia en el Comité Ejecutivo Nacional que comenzó con el propio Ricardo Anaya, luego Damián Zepeda, y ahora Marcelo Torres.

“Agradezco el apoyo de Héctor Larios y de los gobernadores a la vez de hacer un llamado a quienes han expresado su interés de participar en la elección interna, para que juntos construyamos un proyecto que reconoce los errores cometidos, comprometiéndose a corregirlos, realizando un cambio profundo de fondo y de forma.

“Un proyecto que busca fortalecer al partido, que retome nuestra democracia interna y respeto a los militantes, que recupere la confianza perdida con los ciudadanos, que retome las causas originales del PAN; un proyecto donde quepamos todos los que queremos un mejor Acción Nacional y un mejor país”, expresó Cortés.

Ofreció mantener abierta la afiliación con mecanismos que garanticen transparencia e imparcialidad, retomar la capacitación doctrinal, de función pública y legislativa, reformar los estatutos para institucionalizar la inclusión de las minorías para las dirigencias y candidaturas, y que el Presidente y Secretario General Nacional y estatales no puedan ocupar ningún cargo de elección popular por el periodo de su encargo.

También propuso crear una comisión de reconciliación y fortalecimiento institucional para revisar casos específicos de rupturas y pérdida de liderazgos importantes.

Así como evaluar de manera permanente el desempeño de los grupos parlamentarios y que sean los brazos políticos de Acción Nacional que los muestren como una clara oposición y contrapeso de poder con el Ejecutivo Federal.

 

NCG