Como nos hemos dado cuenta, el mal de estos tiempos es que nos hemos convertido en especialistas de todos los temas, porque tenemos acceso a la información de manera directa y rápida; ya no le creemos a nadie, dudamos hasta de los doctores y rápido entramos a google para saber qué medicamento nos están recetando.

Precisamente en redes sociales, se refleja lo antes escrito. Si hablamos de fútbol, sismos, animales, causas sociales, enfermedades, música, teatro o cine, todos somos expertos. Ha surgido un nuevo término: somos opinólogos profesionales y debatimos un tema con las peores ofensas si es necesario, juzgamos y calificamos los hechos como si fuéramos los protagonistas.

Por eso somos intolerantes y siempre queremos tener la razón, porque pensamos que nuestros argumentos son más valiosos que los del que tenemos enfrente. Así sucedió con Lucía Méndez, quien comentó que a los grandes ídolos como Luis Miguel y Alejandro Fernández, el público les perdona todo, sin importar si suben alcoholizados o drogados, que por eso son ídolos, ya que sus fans los admiran sin control.

A lo cual, Laureano Brizuela respondió que no estaba de acuerdo, y quiso dejar claro que no es correcto que un artista le falte el respeto al público y se presente en estado de ebriedad a un concierto. Al cantante no le gustó que Lucía lo metiera en un tema, como si todos pensaran lo mismo y por eso externó su opinión. Además, Lucía para callarlo, remató diciendo “tú no sabes, porque tú eres cantante, no ídolo”. Y reiteró en su boletín diciendo que Laureano fue famoso y que no fue pleito, simplemente una opinión distinta.

Laureano y Lucía estarán juntos en un show que reúne a varios artistas famosos de los 80. El intérprete no peleará más, pero aclara que la Méndez le hizo un favor al reconocer que él sí es cantante, porque ella dista mucho de serlo. Total que entre charla y charla dejan claro que no se caen nada bien, pero seguirán trabajando juntos. Por fortuna el show no los reúne en el escenario, pues cada quien cantará sus temas y no harán duetos.

Laureano no pelea su lugar, le da igual cerrar o abrir el concierto. Confirmó que si las cosas salen bien, se hará una gira con este concepto titulado Grandes de los 80s, y si pudiera cantar con alguien preferiría hacerlo con María del Sol o Marisela. Además, el cantante está en espera de que en octubre se resuelva el juicio que interpuso en contra del Estado; ya que fue encarcelado cuatro meses y medio en nuestro país hace 27 años, acusado por evasión de impuestos. Le congelaron sus cuentas y pasaron por encima de sus derechos humanos, así que se fue a una corte internacional en Washington y de resultar ganador en dicho juicio, el gobierno mexicano tendría que resarcir el daño y pagarle 80 millones de dólares. Laureano aclara que jamás cometió fraude; le hicieron mucho daño, pues una administración corrupta le arrebató su libertad,  y perdió a su esposa Graciela Michelli quien lo abandonó y a sus cuatro hijos, además de gastar mucho dinero para poder salir de la cárcel.

Hay más… pero hasta ahí les cuento.