@guerrerochipres

 

Es insuficiente hablar de violencia de género y de la tragedia del feminicidio si no incorporamos soluciones supervisables y medibles. También si no las divulgamos y buscamos su correcta aplicación.

La activación del protocolo especializado de feminicidio, recientemente desplegado por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México ante la muerte de cuatro mujeres, es una de las herramientas del proceso investigado y de combate a la impunidad.

La fiscal Ernestina Godoy Ramos advirtió del fenómeno atípico, como le llamó, de una semana con la alta frecuencia de homicidios. En contraste, en el mes de enero de 2020 en la capital nacional no se presentó un solo caso.

La violencia contra las mujeres requiere de la participación de miles de personas, especialmente las dispuestas a denunciar las violencias contra ellas. Raramente, el feminicidio aparece como delito único o como el primero. En muchas ocasiones, por otro lado, especialmente en el caso de niñas y mujeres mayores conocemos de la violencia contra ellas gracias a testimonios de terceros.

Ante la desaparición de personas, de mujeres en particular, nada parece ser suficiente o suficientemente rápido para dar con el paradero de una persona victimizada.

La desesperación de los familiares de las víctimas requiere válvulas de escape, mecanismos de atención, acompañamiento y la derrota de la impunidad de los perpetradores.

En una década, hay más de dos mil 586 casos de personas desaparecidas, de acuerdo con Mariana Morales Guerra, encargada de la Comisión de Búsqueda de Personas de la Secretaría de Gobierno de la CDMX. Al menos una décima parte son mujeres.

La realidad de que ya no son 72 horas para atender desapariciones, sino que hay un mecanismo detonable inmediatamente contribuye a asegurar que la autoridad actúe prontamente.

En el Gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo hay avances: menos casos y menos impunidad aun cuando hay mucho camino por recorrer. Abona al realismo y credibilidad institucional que se reconozcan los problemas y se actúe frente a ellos.

El feminicidio en CDMX en 2020 comparado con 2019 presenta una disminución de 11.1%. De los 179 casos presentados entre 2018 y 2020, 122 responsables están vinculados a proceso y se obtuvieron de los jueces 54 sentencias condenatorias.

Godoy Ramos informó de la vinculación a proceso de 20 posibles agresores; 13 fueron resultado de órdenes de aprehensión y siete detenidos en flagrancia.

El protocolo es tan importante como conocerlo, difundirlo y utilizarlo. Si existe desatención o negligencia de las autoridades, el Consejo Ciudadano -gratuitamente, 24/7 en el 55 5533 5533– atiende el caso y comparte con la titularidad de la FGJ cualquier omisión o mala práctica, tan inaceptable con cualquier tipo de violencia contra las mujeres.