Foto: Cuartoscuro / archivo Actualmente, indicó otro de los retos entre sus más de 100 agremiados fue la distribución de insumos en algunas zonas  

A pesar de que la epidemia de Covid-19 raya en casi 50 mil muertes en el país, la industria funeraria asegura no tener colapso y haber aprendido a trabajar durante la crisis, de acuerdo con Roberto García, vicepresidente de la Asociación Nacional de Directores de Funerarias (ANDF).

Aunque a la primera semana de junio sus asociados trabajaban con turnos dobles en sus crematorios, sobre todo en la Ciudad de México y área metropolitana, indicó que la situación ya se ha normalizado.

“No (hay colapso en los servicios), sólo en algunos estados, Yucatán, Tabasco, Veracruz, son donde los turnos de crematorio han tenido que mantenerse día y noche.

“Como toda crisis, el primer impacto es aprender a trabajar, hoy en día ya estamos acostumbrados y tenemos una metodología muy establecida para atender los casos de Covid, y eso hace que nos volvamos más ágiles”, comentó en entrevista con 24 HORAS.

Aunque a inicios de la pandemia los tiempos para una cremación podrían ser hasta de dos días, indicó que actualmente el tiempo máximo es de 12 horas.

“Había mala información y sigue habiendo de que en los hospitales indican que el cuerpo se debe cremar, pero también hay gente más informada que está optando por la inhumación”.

Actualmente, indicó otro de los retos entre sus más de 100 agremiados fue la distribución de insumos en algunas zonas.

“Yo creo que los principales retos han tenido que ver con la distribución de insumos; por ejemplo, en las penínsulas de Baja California y Yucatán. Hablamos de equipos de protección personal y ataúdes, porque la mayoría de éstos se fabrican en el centro del país, entonces hubo un alto requerimiento cuando hubo un alto número de defunciones en esa zona”.

Ven estigma

Sobre las verificaciones, García consideró que sólo acuden con las funerarias que tienen registro en la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), pero no combaten a la informalidad, donde incluso se han dado alzas en precios.

“Ha habido una vigilancia muy estrecha por parte de las secretarías ambientales en los crematorios, nosotros lo sentimos como una presión a nuestro trabajo.

“Hay una verificación como nunca. Verifican primero a la base de datos que ya tenían, pero la informalidad sigue sin ser atacada como tal”.

El entrevistado también hizo un llamado al público en general, pues se han dado hasta cerca de 10 bloqueos crematorios en Oaxaca y el Estado de México, por temor a contagios por coronavirus.

“Por mala información, las personas creen que un crematorio es una fuente de contaminación. Es un estigma que se ha ganado el crematorio. Invitaría al público a hacer una reflexión, porque son equipos muy eficaces.

“Si los vecinos nos cierran un crematorio, eso sí es un foco de contaminación porque dónde se creman esas personas”.

LEG