Los cineastas argentinos en el Festival Internacional de Cine de Cannes fustigan los recortes en la cultura del presidente ultraliberal Javier Milei, una “cruzada”
Foto: AFP | Los cineastas argentinos en el Festival Internacional de Cine de Cannes fustigan los recortes en la cultura del presidente ultraliberal Javier Milei, una “cruzada”  

Los cineastas argentinos en el Festival Internacional de Cine de Cannes fustigan los recortes en la cultura del presidente ultraliberal Javier Milei, una “cruzada” que, según ellos, tendrá un gran impacto en el cine.

Esta edición del certamen, se incluyen siete títulos argentinos, el contingente latinoamericano más importante de este año. Pero ocurre en un contexto difícil en el país, inmerso en una grave crisis económica que el gobierno de Milei quiere reducir los gastos del Estado.

El delegado general de la muestra, Thierry Frémaux, defendió el cine como un “arma patriótica” que puede valorizar la cultura de un país y comparó “la situación difícil” de la  industria cinematográfica argentina con la buena tendencia en el sector en Brasil.

Desde la Quincena de Cineastas, una sección paralela centrada en los nuevos talentos, también respaldaron la cinematografía argentina, “hoy en peligro aunque rebosa de cineastas singulares y apasionantes”.

Por otro lado, Gary Oldman se declaró ayer “hipercrítico” de su trabajo, una manera de justificar su tono peyorativo con su propia intervención artística en la serie Harry Potter, que calificó de “mediocre”, provocando polémica entre los fans. 

Los actores “siempre son hipercríticos” de su trabajo, declaró Oldman en rueda de prensa en Cannes, donde participó en el estreno de Parténope, del italiano Paolo Sorrentino. 

En la cinta que concursa por la Palma de Oro, Oldman interpreta al escritor John Cheever, que toda su vida luchó con el alcoholismo.

“Acabo de festejar 27 años de sobriedad”, reveló Oldman en la sala de prensa, provocando aplausos. “Cuando Paolo me dijo ‘quiero que interpretes a este poeta triste, melancólico,  borracho’, le contesté: ‘Claro, ¡ya sé lo que eso!”.

En la jornada, el director brasileño Karim Ainouz presentó en la competición por la Palma de Oro, Motel Destino, una película de alto voltaje sexual. 

La Semana de la Crítica concedió ayer su Gran Premio a la cinta argentina Simón de la Montaña, primer largometraje del director Federico Luis; y el premio de la Fundación  Louis Roederer al actor Ricardo Teodoro, uno de los protagonistas de la película brasileña Baby. 

El portugués Miguel Gomes estrenó en la selección oficial Grand Tour, la historia de un funcionario británico, instalado en Birmania en 1917, que huye de su prometida y emprende un viaje caótico por varios países asiáticos.