Pocos lo saben:

 

Hoy, hace 30 años, Diego Fernández de Cevallos ungió a Ernesto Zedillo Ponce de León como candidato a la Presidencia de la República en sustitución de Luis Donaldo Colosio.

 

Bueno, él y el desaparecido Carlos Castillo Peraza.

 

Vaya la información:

 

Tras el crimen de Lomas Taurinas, Carlos Salinas de Gortari buscaba el relevo del sonorense y enfocó sus intenciones hacia Pedro Aspe Armella, su secretario estrella en Hacienda y Crédito Público.

 

Pero había un problema:

 

El prospecto debería haber dejado la función pública -en su caso el gabinete- por lo menos seis meses antes y Aspe Armella no cumplía ese requisito constitucional.

 

Pese a todo, Salinas de Gortari maniobró por muchas vías: en el PRI para someter las aspiraciones de Fernando Ortiz Arana; con los gobernadores y con los panistas, con quienes había cogobernado.

 

El primer problema le saltó en Toluca:

 

Emilio Chuayffet Chemor contestó al intermediario, aparentemente a José María Córdova, con un rechazo absoluto:

 

-Dígale usted al señor Presidente que un país que modifica su Constitución para un hombre, es un país bananero y México no es un país bananero. Me opongo rotundamente.

 

 

NO SE EQUIVOQUE

 

 

La segunda resistencia provino del PAN.

 

El candidato Diego Fernández de Cevallos y el dirigente Carlos Castillo Peraza acudieron a Los Pinos para escuchar la propuesta y el yucateco ni siquiera lo dejó terminar:

 

-No se equivoque, señor Presidente.

 

Terció el queretano:

 

-Para qué se hace bolas. Ahí tiene usted a Ernesto Zedillo sin ningún inconveniente legal como otro miembro del gabinete…

 

Se fueron y así quedó sellada la decisión.

 

Luego se instrumentó el operativo, previa orden de declinación de Fernando Ortiz Arana, para designar al mediodía del martes 29 de marzo a Ernesto Zedillo Ponce de León.

 

Resignado, Salinas escuchó el consejo de Diego Fernández y tuvo cuatro días para operarlo, someter la rebelión priísta contra un desconocido por la militancia e imponer su designio aunque al final lo pagara con persecución y ostracismo.

 

 

PODER DEL ESTADO

 

 

1.- Parecía una denuncia de baja monta, pero no.

 

La Unidad de Inteligencia Financiera, el SAT y otras dependencias van con las peores intenciones contra Ramón Abraham Matuk por sus nexos con Genaro García Luna y Luis Cárdenas Palomino.

 

El primero está detenido en Nueva York ante un proceso sin libertad a la vista y el segundo permanece encerrado en México por varios delitos, sobre todo narcotráfico y lavado de dinero.

 

Y en este lavado el actor principal es Ramón Abraham Matuk, el siguiente objetivo de López Obrador y del Gobierno mexicano, casualmente en tiempos electorales.

 

Las pruebas de la investigación son varias camionetas blindadas de la entonces Secretaría de Seguridad Pública y unos 20 millones de pesos… mal enjuagados, según parece.

 

Y 2.- Los sindicatos capitalinos eran terreno blindado por el morenismo para priístas y panistas.

 

Pero el candidato opositor capitalino Santiago Taboada ha roto ese mito y sumado al líder transportista Fernando Ruano.

 

Claro, atrás están los proyectos del Frente Amplio por México para reorganizar la vida capitalina con especial cuidado el transporte público, el sector salud y el Metro.

 

A la izquierda se le rebasa por la derecha.  

 

Las opiniones expresadas por los columnistas son independientes y no reflejan necesariamente el punto de vista de 24 HORAS.