Aclaran. El encargado de despacho de la FJG y Martí Batres, informaron que no se pagó recompensa por Eduardo N. porque no se recibió una denuncia. 
Foto: Especial | Aclaran. El encargado de despacho de la FJG y Martí Batres, informaron que no se pagó recompensa por Eduardo N. porque no se recibió una denuncia.   

Con la detención de Eduardo N., alias “El Chori”, La Unión Tepito quedó atomizada y la disputa por el control del grupo delictivo se dará entre las distintas células que ahí operan, pronosticó el titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) capitalina, Pablo Vázquez Camacho.

A unas horas de la captura de quien fuera señalado por las autoridades del Gobierno de la Ciudad de México y la Fiscalía General de Justicia como el líder del grupo criminal y por el cual ofrecieron una recompensa de 5 millones de pesos, se dieron a conocer algunos detalles del personaje.

Para el jefe de Gobierno, Martí Batres, fue un gran golpe contra los generadores de violencia ya que desde hace meses se le perseguía y se sabía que andaba en una camioneta blanca junto con una mujer por diversas alcaldías. 

En conferencia se cuestionó quién tomaría el control de La Unión Tepito y el titular de la SSC dijo: “Tiene varias facciones, varias células que también son resultado de la atomización propia de la acción institucional y esas células tienen distintos liderazgos. Hay varios de ellos, algunos de ellos están incluso incluidos como objetivos en el mismo programa, sobre los que se tiene seguimiento y líneas de investigación.

Pese a la oferta de recompensa, “El Chori” no fue detenido por reportes de su ubicación, sino por trabajos de seguimiento iniciados en febrero a través de cámaras de vigilancia, detalló el titular de la SSC. 

Durante su detención proporcionó diversos nombres y al final reconoció ser Eduardo N., pero él no sabía nada de La Unión Tepito por lo tanto pedir que no se le relacionara.

Para Vázquez puntualizó que para identificar a Eduardo N, los agentes de la SCC utilizaron las señas particulares que se tienen de su ingreso al Sistema Penitenciario como una verruga en la ceja derecha, las orejas amplias, la nariz recta y de base ancha, un lunar en la mejilla izquierda, comisuras marcadas, la mandíbula dislocada y los labios gruesos, así como diversos tatuajes que coinciden con sus señas particulares en la detención del 2002.

En su historial criminal, “El Chori” cuenta con dos ingresos a prisión por los delitos de robo en 1998 y tentativa de robo en 2002; actualmente cuenta con una orden de aprehensión por el delito de homicidio calificado, abundó.

Eduardo N., comenzó a destacar dentro de La Unión Tepito y fueron sus habilidades para liderar y la forma agresiva de actuar lo que ayudó a ser el futuro jefe de la organización considerada de la de mayor presencia en la capital. De modo que el capo tuvo a su cargo varias áreas dentro de la organización.