En la Ciudad de México, desde hace 20 años cada 19 de septiembre se realiza un simulacro de sismo que se ha convertido en un símbolo de la cultura de prevención y la Protección Civil para los habitantes y autoridades quienes enfrentaron dos fenómenos naturales de gran magnitud en 1985 y 2017.
A partir de 2022, este ejercicio se replicó a nivel nacional y no solamente se hará respecto a un movimiento telúrico, sino de huracanes y ciclones, para que las personas tengan la capacidad de reaccionar ante un fenómeno natural.
Las autoridades de Protección Civil señalan que las personas en México deben practicar sus planes de acción ante amenazas naturales. Dado que en algunas latitudes del país es mucho más común enfrentarse a un ciclón, representar una amenaza así sirve para ubicar las zonas de refugio y las actividades a seguir en caso de una emergencia.
En 2004, el jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador, instituyó al noveno mes del año como “Septiembre mes de la Protección Civil” y a partir de entonces se desarrollan diversas actividades preventivas, como la organización de simulacros, a fin de fortalecer la cultura de la autoprotección.
Desde entonces se implementó realizar una actividad en la cual las oficinas de gobierno, inmuebles de la iniciativa privada y en las viviendas se escenificará la una evacuación para que las personas sepan qué hacer antes, durante y después de una situación de emergencia por un temblor.
Lo anterior con base a lo ocurrido la mañana del jueves 19 de septiembre de 1985, cuando un sismo de magnitud de 8.1 grados, con epicentro en las costas de Michoacán y Guerrero, causó daños en la Ciudad de México.
Como resultado de estos sismos, se cuantificaron 2 mil 831 inmuebles afectados y 20 mil personas perdieron la vida. 017, en los límites de Puebla y Morelos.
Como una coincidencia, un temblor de magnitud 7.1, en 2017, ocurrió a las 13:14 horas, momentos después del simulacro de sismo; el epicentro fue entre los estados de Morelos y Puebla.
Por este temblor se reportaron 369 muertos y las afectaciones en casas y edificios dejaron pérdidas de hasta 62 mil 99 millones de pesos.
LEG