Foto: Cuartoscuro / La laguna de los siete colores es uno de los mayores atractivos de la zona, pero los escurrimientos la ponen en peligro, advierten expertos.  

El municipio de Bacalar, conocido por su impresionante Laguna de los Siete Colores, enfrenta una grave problemática ambiental debido a la devastación forestal que ha alcanzado aproximadamente 60 mil hectáreas en la zona, reporta el Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible (CCMSS).

La comunidad menonita de Salamanca es identificada como el punto crítico de esta situación debido a la expansión agrícola. Sin embargo, para este año 2023, la situación se ha intensificado hasta alcanzar cerca de 60 mil hectáreas deforestadas, reportaron los ambientalistas.

Mientras que la ciudad de Bacalar abarca solo 535 hectáreas, al oeste del municipio y hacia Hopelchén, Campeche, se ha deforestado un área mil 100 veces mayor para dar paso a la expansión de la comunidad menonita y sus actividades agrícolas.

El exregidor de Bacalar, José Daniel Barruch Lucero, explicó que hace unos 15 años, este grupo de personas se asentó en el territorio y desde entonces se han dedicado a la tala de la selva y al cultivo intensivo de semillas y soya, en ocasiones utilizando variedades transgénicas, lo que impacta negativamente en la producción mielera.

“Los menonitas en México, o en cualquier país trabajan un cultivo mecanizado, tienen que deforestar. Si bien ya hay un impacto, posiblemente veremos sus consecuencias en el futuro”, mencionó Barruch Lucero.

Esta desenfrenada actividad ha tenido consecuencias devastadoras para la biodiversidad local, afectando gravemente a los apicultores que han reportado la pérdida del 30% de sus colonias de abejas debido al uso de técnicas de deforestación que acaban con la flora y al empleo de agroquímicos.

Además, este problema va más allá de la apicultura, ya que la ausencia de suficientes árboles en la zona provoca que los escurrimientos de agua hacia la Laguna de Bacalar sean más intensos, lo que podría arrastrar tierras rojas y negras que alterarían los característicos colores del fondo de la laguna, responsables de su denominación como “La Laguna de los Siete Colores”, y que en 2020 ya tuvo una grave afectación.

LEG