Dadas las mejoras en las cadenas globales de suministro en la industria automotriz, se prevé que los tiempos de entrega de vehículos nuevos en el mercado interno se normalicen hacia el cierre del primer semestre de 2023, de acuerdo con estimaciones de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
Durante 2021 y 2022, el sector automotriz atravesó un panorama adverso por la crisis global de semiconductores –que se emplean para la fabricación de automotores–, que a su vez incidió en una baja disponibilidad de inventarios de vehículos en el mercado nacional, provocando largos tiempos de espera para la entrega de vehículos a los clientes.
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“El año pasado estábamos iniciando con un tiempo promedio de espera de cuatro meses para entregar los vehículos solicitados por los consumidores. Hoy nos encontramos con menos de dos meses”, refirió Guillermo Rosales Zárate, presidente de la AMDA.
“Con lo que conforme a las conversaciones, las aportaciones de información de las diferentes asociaciones de marca que conforman el gremio de la distribución de automotores, estimamos que al cierre del primer semestre estaremos en condiciones de normalidad con tiempos de espera, una vez que se concreta la operación, entre tres semanas y un mes”, añadió.
En conferencia de prensa, expuso que la proyección de ventas de vehículos ligeros para 2023 se ubica en un millón 129 mil 910 unidades, lo que representa una cifra superior al millón 094 mil 609 automotores comercializados durante 2022.
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Sin embargo, acotó que dicho pronósticos de ventas está sujeto a la dependencia de recuperación de la industria automotriz respecto a su capacidad de manufactura y de suministro para el mercado mexicano.
EAM