Prohibir las terapias de conversión, legalizar matrimonio igualitario en todo el país, agilizar búsqueda de personas desaparecidas por limpieza sexual, explotación sexual o con fines de corregir su orientación sexual; son algunas de las peticiones que se escucharon en el Primer Parlamento Juvenil LGBTIQ+ 2022, organizado por el Senado y la bancada de Movimiento Ciudadano (MC).

En este evento participaron 64 personas quienes coincidieron en la necesidad de crear políticas públicas que garanticen justicia y aprovecharon para pedir que se respete su dignidad y derechos humanos.

En este contexto, senadores de oposición y de Morena consideraron urgente aprobar el dictamen, avalado hace más de dos años en comisiones, para prohibir las terapias de conversión por el gran dolor que causan al estar consideradas como tratos crueles e inhumanos.

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La senadora Patricia Mercado, principal impulsora del Parlamento, recordó que hace 3 años y 8 meses, tres legisladoras presentaron una iniciativa para prohibir los esfuerzos para corregir la orientación sexual y la identidad de género.

“El dictamen aprobado en comisiones desde hace más de dos años, no ha sido sometido a discusión y votación en el pleno. Aunque, contamos con un compromiso público de que al fin sucederá en el siguiente periodo ordinario de sesiones”, refirió.

El ex presidente del Senado, el morenista Eduardo Ramírez, coincidió en que la prohibición de las terapias de conversión es un tema pendiente en la agenda para que los derechos de esta comunidad sean respetados.

“Ha sido una asignatura pendiente en el Senado y por eso para nosotros tiene y es fundamental a partir del primero de septiembre legislar en esa materia”.

Destacó que en el contexto de la reforma político-electoral, es el momento adecuado para incluir no solamente la participación de candidaturas para esta comunidad, “no solamente es garantizar el saque, la participación política, sino garantizar también el punto de llegada

El coordinador de la bancada naranja, Clemente Castañeda, dijo que con este parlamento se busca visibilizar a las comunidades de la diversidad sexual y fomentar su participación en los ejercicios de representación política.

Lamentó que a nivel federal hay muy pocos esfuerzos para visibilizar, proteger o garantizar los derechos de las comunidades sexuales. “México tiene aún mucho que recorrer, deshacerse de los prejuicios, estigmas que nos impiden justamente reconocerlos”, declaró.

Destacó que en México falta mucho para que ninguna persona tenga que esconder su identidad, “su orientación por miedo a ser violentadas o para que ninguna institución pública o privada actúe con el velo de la discriminación y el odio. Para ninguna persona sea tratada como ciudadana o ciudadano de segunda”.

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El parlamento fue inaugurado por el morenista José Narro, vicepresidente del Senado, quien recordó que México es el segundo país en América Latina con más violencia por homofobia y transfobia; ante lo cual, pidió un minuto de silencio por todas las víctimas del odio y la discriminación en México.

Reconoció que la comunidad LGBTIQ+ vive una discriminación anónima y monstruosa. “Ser lesbiana, gay, bisexual, trasveti, transexual, trasgénero responde a una relación con sociedad que los califica y acosa a través de prejuicios y estigmas, que los excluye y silencia, que no reconoce sus derechos y les cierra las oportunidades”, afirmó.

LDAV