Apenas comenzando el año, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) registró un aumento del 472% en incapacidades temporales para el trabajo, siendo este el pico máximo desde que inició la pandemia.

Según informó Mauricio Hernández, director de Prestaciones Económicas y Sociales del IMSS a través de su cuenta de Twitter el pasado 12 de enero, tan solo en las primeras dos semanas del mes se dieron 92 mil incapacidades temporales, todo esto atribuido al reciente aumento de casos de COVID-19 y la llegada de la variante Ómicron.

Así mismo, Hernández pronosticó que para el primer semestre de 2022 un total de 1.5 millones de trabajadores habrán solicitado una incapacidad temporal, lo cual provocará un gasto institucional de mil 215 millones de pesos. Comparándolo con el primer semestre de 2021, se puede ver un cambio significativo en las incapacidades temporales, pues sólo hubo 741 mil solicitudes.

De acuerdo con las cifras proporcionadas por el Dr. Mauricio Hernández, durante los dos primeros años de la pandemia se presentaron tres picos máximos con respecto a la solicitud de incapacidades: el primero fue en la semana 30 del 2020, con un alza de 48 mil solicitudes, el segundo en la semana 22 de 2021 con 71 mil y el tercero en la semana 32 de 2021 con 81 mil solicitudes.

Por otra parte, el IMSS registró que en la última semana los estados de Colima, Durango, Sinaloa, Zacatecas, Nayarit, Nuevo León y San Luis Potosí, han presentado un incremento de 300% con respecto a la solicitud de incapacidades temporales del trabajo. Las cuatro primeras entidades se encuentran hasta el momento en semáforo amarillo.

En general, los estados que más han presentado incapacidades temporales de trabajo desde que empezó la pandemia por COVID-19 son el Estado de México, Ciudad de México, Jalisco y Nuevo León.

 

PL