Foto: Cuartoscuro Víctor Villalobos Arámbula señaló que el proyecto ayudó a mitigar los efectos de la sequía, garantizando la producción agrícola de riego  

El proyecto de estimulación de lluvias, que se llevó a cabo por primera vez en México, logró asegurar la producción agrícola de riego y temporal.

Lo anterior también permitió incrementar los volúmenes de captación en las presas y combatir incendios forestales, aseguró la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).

El proyecto de bombardeo de nubes, que fue operado a través de la Comisión Nacional de las Zonas Áridas (Conaza) y el apoyo de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM), ayudó a que se diera la precipitación de lluvia, misma que permitió el crecimiento de alimento para el ganado, la siembra de cultivos de temporal y la entrada de agua a las presas.

El titular de la Sader, Víctor Villalobos Arámbula señaló que el proyecto ayudó a mitigar los efectos de la sequía, garantizando la producción agrícola de riego en los cinco proyectos regionales que cubren 40% de la superficie nacional de los distritos de riego y 33% de las unidades de riego del país.

Con lo anterior, sostuvo el funcionario federal, se aseguró la producción de alimentos.

El esquema implementado por la Conaza, también coadyuvó al incremento en los volúmenes de captación de las presas de los seis proyectos regionales, en los que se registraron variaciones desde 55% hasta 65%, y en el caso de la Laguna de Mexicanos en Chihuahua alcanzó el 90%.

dato
40% de la superficie nacional de los distritos de riego se cubrió

LEG