Luis González y González el historiador que desafió la historia como se conoce
Foto: Twitter/ @RabinSalazar Esto era totalmente opuesto a lo establecido y aceptado.  

Un día como hoy pero de 2003, abandonó este mundo el historiador mexicano Luis González y González, pero como legado dejó su invento, la “microhistoria”.

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Su aporte fue de suma relevancia para la labor de los historiadores en el país y e toda América, pues el letrado afirmó que “la historia nacional era en realidad una microhistoria de la ciudad de México”, haciendo alusión a la tendencia de que lo trascendente siempre gire en torno a las capitales.

González proponía que la historia se abordará por espacios delimitados y pequeños, de esta manera se podría hablar de los acontecimiento vigentes de las localidades y no se requerirá un contexto histórico para ser entendidos.

Esto era totalmente opuesto a lo establecido y aceptado, pues la historia siempre considera su pasado y personajes como el punto central de la actualidad.

Luis se dedicó a confirmar su propuesta con su propia obra y de ese modo nació, “México: Pueblo en vilo” ; libro que ganó un best seller a pesar de tratarse de un trabajo académico.

Tres años después de su publicación, ganó el premio Haring de la American Historical Association, galardón designado al investigador latinoamericano que haya publicado el libro más relevante en cinco años.

Esta obra puso de manifiesto que los grandes acontecimientos del país pudieron no haber sido tan grandes para toda la nación como en el Bajío mexicano, donde tuvo más relevancia la guerra cristera que la lucha armada. Con esto se dio no solo una mirada diferente, sino la oportunidad de hacer cuestionamientos sobre lo establecido en las ideas del país.

González se esforzó en hacer obras comprensibles para todo el público , sobre todo para los habitantes de su pueblo, San José de Gracia.

Luis González también elaboró otras tres microhistorias: La tierra donde estamos (1971), Zamora (1979) y Sahuayo (1979). 

GR