Foto: Ángel Ortiz El joven hacía trucos con el balón en los semáforos y fue invitado a sumarse al programa Ponte Pila del Gobierno capitalino  

Sin saber en un inicio que el freestyle es un deporte, Diego Huepa, instructor del programa Ponte Pila en la alcaldía Tlalpan, comenzó desde pequeño a hacer los primeros trucos con el balón de futbol.

“Cuando yo empecé, desconocía que el freestyle es un deporte. Yo veía videos de Ronaldinho y sólo imitaba los movimientos; buscaba tutoriales de personas sin conocer que ellos practicaban profesionalmente”, cuenta el joven en entrevista.

Lamenta el poco apoyo que se le da a este deporte y, al igual que sus compañeros que lo practican, Diego ha tenido que mostrar sus habilidades con el balón en los cruceros viales a cambio de un apoyo económico que le permita seguir creciendo profesionalmente.

Su esfuerzo rindió frutos, pues hoy este joven es instructor deportivo e imparte cuatro horas diarias de clase durante cinco días a la semana con una asistencia de hasta 20 niños.

Explica que para la enseñanza del freestyle no se requiere de una cancha de futbol, sino sólo de un espacio abierto donde los aprendices puedan desarrollar sus habilidades.

Diego relata que al estar en un semáforo se encontró con promotores del programa Ponte Pila que lo invitaron a participar.

A la par de las clases, el joven sigue yendo a los cruceros viales durante una o dos horas para obtener un poco más de ingreso y adquirir tenis o balones.

“Ponte Pila es algo increíble, ya que te da la oportunidad de practicar cualquier actividad sin ningún costo. Es un impacto muy grande en la sociedad: los eventos deportivos, las clases y demás actividades que tiene el programa”, festeja.

LEG