Foto: Cuartoscuro / archivo La CDMX contaba con 117 módulos para la realización de pruebas, pero al corte de abril pasado, sólo había en operación 40  

La realización de pruebas Covid-19 en México se redujo 47.5%, de enero a noviembre pasado al pasar de 33 mil 007 pruebas diarias a 16 mil 066, de acuerdo con datos del Instituto de Métricas y Evaluación (IHME) de la Universidad de Washington.

Con la mayoría del país en color verde del semáforo epidemiológico, las actividades cotidianas y la movilidad han comenzado a retomar su ritmo, incluso, por las calles se observa a gente que ya no porta el cubrebocas pese a que la pandemia continúa y reportes señalan que el Indre investiga un caso de la nueva variante Ómicron.

Así, el 7 de octubre pasado se comenzó a registrar un descenso en las pruebas diarias que se realizan en territorio mexicano, según datos de la Universidad de Oxford.

Infografía: Xavier Rodríguez

En lo que va del año, indica, el día que más pruebas se realizaron fue el 13 de agosto con 0.37 por cada mil personas, mientras que en esa misma fecha países como Estados Unidos y Canadá realizaron 3.79 y 1.63, respectivamente.

Debido a que el número de pruebas suele ser volátil de un día a otro, Oxford destaca que las mediciones se muestran “como un promedio móvil de siete días”.

Apenas el 8 de noviembre pasado, Estados Unidos abrió sus fronteras con México y Canadá a los viajes no esenciales luego de 20 meses de cierre debido a la pandemia de Covid-19.

En tanto, en la Ciudad de México la realización de estos test bajó 39% al pasar de 7 mil 940 diarios a 4 mil 480 en el periodo del 24 de noviembre de 2020 a la misma fecha un año después, según datos del Gobierno capitalino.

En un recorrido realizado por 24 HORAS se observó que los macroquioscos que quedan en la capital del país lucen vacíos. En la alcaldía Gustavo A. Madero, los médicos están sentados, platicando, ante la falta de usuarios que buscan realizarse una prueba.

“Aquí nos siguen llegando las mismas pruebas diarias, que son cerca de mil, de las cuales estamos aplicando a lo mucho 300 al día, nada que ver a las largas filas que se veían a inicios de año”, expresó Gerardo Ruiz, médico de dicha unidad.

Resaltó que hace un año las personas acudían por precaución o por síntomas, y ahora únicamente porque la necesitan para entrar a conciertos o salir de viaje.

“Afortunadamente la mayoría de la gente viene porque necesita su prueba para su trabajo, salir de viaje o entrar a algún evento masivo”, declaró.

En el macroquiosco de la explanada de la alcaldía Cuauhtémoc, la situación es similar y predominan las sillas vacías. Roxana Gamboa, doctora que aplica las pruebas, señaló que calcula una reducción de 40% entre enero y noviembre.

La CDMX contaba con 117 módulos para la realización de pruebas, pero al corte de abril pasado, sólo había en operación 40.

José Ramírez, estudiante, refirió: “Desde que inició la campaña de vacunación he notado que en el quiosco que está cerca de la casa de mi novia ha bajado un montón la afluencia”.

Mientras que Karla Gómez, madre de familia dijo que actualmente “estamos más relajados (…) ahorita ya no me espanto tan fácil”.

LEG