Juventus tiene una cara distinta en la Champions, contrario a lo que se ve en la Serie A, donde tardó cuatro fechas para ganar, mientras que en Europa cuenta ya con dos victorias y se instala de momento como líder del Grupo H.
Uno de los duelos más parejos de esta fecha en la Champions League se jugó en Turín, donde la Juve se cruzó con el Chelsea, vigente campeón y que en el papel era favorito para llevarse los tres puntos, pero no pudo batir la meta bianconera.
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A pesar de que el acoso fue mayor por parte de los ingleses al tener 16 disparos por solo seis de los italianos, fueron estos últimos los que terminaron siendo certeros por medio de Chiesa, quien un minuto después de volver del descanso, batió a Mendy con el único tanto que hubo en el partido.
Ziyech, Havertz y Lukaku intentaron, pero la solidez de Bonucci y de Ligt en la central, así como Szczesny en la portería, evitaron que los atacantes blues festejaran.
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La Vecchia Signora requiere de un triunfo en Rusia ante el Zenit para firmar una primera ronda en la fase de grupos perfecta y poner rumbo a los octavos de final, donde podría evitar a los clubes más fuertes de preservar la primera posición.
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