Luego de que el secretario de Gobierno de la CDMX, Martí Batres, informó que fue a petición del Congreso local que se colocó un cerco policiaco en torno al recinto, la presidenta de la Mesa Directiva, Patricia Báez, resaltó que no se le pueden imputar las agresiones a los alcaldes electos por parte de la Policía.

“Cómo presidenta de la Mesa Directiva del Congreso de la ciudad siempre hemos tenido el apoyo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana para garantizar la paz, pero no pueden ser imputables a la mesa las agresiones de hoy. Reitero mi rechazo a la violencia contra la ciudadanía, alcaldesas y alcaldes electos”, publicó la legisladora en su cuenta de Twitter.

Más tarde, tras reunirse finalmente con los alcaldes electos, la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Congreso rechazó “los acontecimientos de violencia que se registraron esta mañana en los alrededores del recinto parlamentario y ratifica su vocación de respeto a la libertad ciudadana y el derecho de libre manifestación”.

“Nunca el uso de la fuerza por encima del dialogo y la razón”, expresó el diputado Víctor Hugo Lobo, presidente de la Jucopo.

Morena acusa provocación

Por su parte, el partido Morena en la capital aseguró que la Unión de Alcaldías de la Ciudad de México (UNACDMX) “mediante mentiras, engaños y calumnias que buscan crear una percepción de ingobernabilidad y violencia política en la capital del país”.

“Dicha campaña no es más que otra de las artimañas orquestadas por integrantes del Partido Acción Nacional, pues es evidente que fueron provocadores quienes empezaron a golpear a los policías, mientras integrantes de la UNACDMX, encabezados por Lía Limón, incitaban a la confrontación de la cual pretenden victimizarse””.

LEG