El juicio contra dos monjas y otras siete mujeres acusadas en una causa por abuso sexual de niños sordos en un internado en Argentina comenzó este lunes, tras haber sido postergado en abril por el aislamiento por Covid-19 de una de las imputadas.

El juicio se desarrolla de forma semipresencial en la ciudad de Mendoza, sin acceso a la prensa. Ninguna de las imputadas acudió personalmente al tribunal, sino que participaron de forma remota, indicaron fuentes judiciales.

Se trata del segundo proceso en un caso que ha sacudido al país del papa Francisco. En 2019 fueron condenados a más de 40 años de cárcel dos curas católicos por los abusos y violaciones de niños de entre 4 y 17 años cometidos entre 2004 y 2016 en el mismo internado, el Instituto Próvolo de Mendoza.

Las acusadas son las monjas japonesa Kumiko Kosaka, de 46 años de edad; y paraguaya, Asunción Martínez, de 53 años, además de la representante legal del Próvolo, una psicóloga, una cocinera y cuatro directoras de la misma institución.

Kosaka es la más comprometida y afronta cargos por abuso sexual agravado, corrupción de menores y partícipe primario por omisión. Es la única en prisión domiciliaria preventiva.

Al resto se las acusa por corrupción de menores y participación por omisión.

LEG