Rafael Nadal afronta un Masters de Madrid especial. El español será el primer cabeza de serie sobre la arcilla de la Caja Mágica, buscando dar un paso al frente camino del corazón de la temporada. Tras levantar la copa en Barcelona, el mallorquín busca seguir progresando en la superficie más lenta del circuito y trabaja con orden buscando los objetivos.

Desde el viernes tiene dobles sesiones de entrenamiento bajo la mirada de su equipo, trabajando para competir dos años después en la capital española.

“Me siento bien”, reconoció Nadal en la rueda de prensa previa al torneo. “Estoy con ilusión y contento de estar aquí en Madrid. Tenemos público y eso ayuda a nivel energético a tolerar mejor todo lo demás”.

El cinco veces campeón subrayó la ilusión por volver a competir en casa, arropado por el calor de un público que este año acudirá a la Caja Mágica en aforo reducido. “Me gustaría ganar”, remarcó. “Si gano querrá decir que he hecho muchas cosas bien. Barcelona fue un paso adelante importante. Lo que me gustaría sentir es que estoy jugando bien.

Después, se gana o se pierde y es parte de nuestro deporte. Más en unas condiciones más incontrolables como las de este torneo. En general lo que me gustaría es jugar los máximos partidos posibles, intentar conseguir el mejor resultado posible”, explicó.

“Después, analizándolo a nivel más de juego, tener la sensación de que el servicio ha funcionado mejor, que me he encontrado más seguro dentro de la pista, que he vuelto a recuperar la sensación de control. Todo se reduce a una cosa, que es jugar bien. Me gusta analizar las cosas de una manera simple. Es un deporte más o menos simple: tengo que moverme bien, golpear la pelota bien a la pelota y competir bien. Si eso ocurre, las opciones de que haga el resultado positivo son mayores. Y de irme a Roma con una sensación positiva”.

“El deportista se alimenta de entrenamientos y resultados. Esto es una realidad. ¿Lo necesito? No, necesito sentir que estoy jugando bien cada vez que juego partidos, que soy competitivo contra todo el mundo”, explicó. “Esto es lo que ha ocurrido desde que he vuelto a la competición. Perdí un partido contra Rublev que no jugué nada bien, esta es la verdad, pero competitivo estuve. Luché, sin tener casi nada aquel día, conseguí ganar el segundo set y peleé hasta el final. La competitividad no me ha faltado, el juego me ha faltado un poquito, en Barcelona creo que la competitividad también fue excelente, el juego fue de menos a más…”, comentó Rafa.

LEG