La reforma a la Ley de Hidrocarburos busca combatir al comercio ilegal de combustibles, pero es el pretexto más burdo para esconder su verdadera intención: la expropiación directa en ese sector, dijo el líder del PAN en la Cámara de Diputados, Juan Carlos Romero Hicks.

Explicó que la iniciativa enviada por el Ejecutivo pasa por encima del Estado de derecho, deja en peligro la seguridad nacional y energética, y ensombrece el clima para la inversión.

El coordinador del PAN añadió que desde el 23 de marzo, cuando fue recibida la iniciativa, la mayoría de Morena se apresuró a convocar a una discusión con expertos “que no sirvió para la reflexión, ni mucho menos para enriquecer el texto original, siguiendo la orden dictada por el otro poder de la Nación, para que, sin moverle una coma y de manera diligente, se apresten a aprobarla sin más ante el Pleno”.

Recordó que la propuesta establece que la Secretaría de Energía o la Comisión Reguladora de Energía podrán revocar “a discrecionalidad” los permisos de los particulares para la comercialización de hidrocarburos.

FRASE:
“Iniciativa enviada por el Ejecutivo pasa por encima del Estado de derecho y deja en peligro la seguridad nacional y energética”
Juan Carlos Romero Hicks
Líder del PAN en la Cámara de Diputados

LEG