Los estudios del laboratorio de origen español, Pharmamar, el cual llevan varios meses resaltando el gran potencial de su fármaco antiviral Aplidin contra el Coronavirus, ahora con un estudio preclínico publicado en la revista “Science”confirmaron que reduce la carga viral del Covid-19 hasta en un 99%, incluso, siendo más eficaz que el remdesivir, el primer medicamento que consiguió autorización para tratar pacientes de la cepa.
En dicho artículo, titulado como “Plitidepsina tiene una potente eficacia preclínica contra el SARS-Cov-2”, Kris M. White, de la Escuela de Medicina Icahn del Monte Sinaí, en Estados Unidos, señala que “la actividad antiviral de plitidepsina contra el SARS-CoV-2 se produce mediante la inhibición de la conocida diana eEF1A”, resaltando que el medicamento in vitro demostró tener una fuerte potencia antiviral, en comparación con otros usados para contener la cepa.
El estudio fue practicado en 45 pacientes de 13 diferentes hospitales en España y arrojó resultados positivos, por lo que se trabaja con las autoridades de salud de España y otros países para llevar en marcha la fase III del ensayo clínico.
Según se explica en el artículo, “la actividad antiviral de plitidepsina contra el SARS-CoV-2 se produce mediante la inhibición de la diana eEF1A”, es decir, si el tratamiento resulta ser eficaz en humanos, el virus no podrá hacerse resistencia tan fácilmente contra dicho fármaco a través de la mutación.
Se trata de “un inhibidor extremadamente potente del SARS-CoV-2, cuya principal ventaja es que se dirige a una proteína de las células humanas y no una proteína del virus”, lo que como resultado evita a la cepa usar la maquinaria celular para replicarse y crear nuevas nuevas partículas víricas.
“Plitidepsina actúa sobre esos mecanismos celulares de los que el virus se apropia e impide que el virus se reproduzca. Es como si el virus necesitase una ‘fotocopiadora’ para replicarse dentro de la célula y plitidepsina bloquea esa fotocopiadora”.
Finalmente, la forma en la que trabaja este medicamento, lo hace ser independiente de la cepa del virus.