Se acercan los tiempos en donde el trabajo en la Cámara de Diputados se intensificará y la Ley Banxico estará presente. Llamó la atención que hace unos días, el presidente AMLO pidió al Congreso que la autonomía del Banxico debe quedarse a “salvo” y no deberá tener conflictos con organismos financieros internacionales.

¿Qué significa eso? Que tanto Banxico como la SHCP deberán buscar alternativas para reducir el efectivo en dólares que circula en la economía. La parte de efectivo de las remesas, ya vimos que no pasa del 1% anual de lo que se recibe (menos de 400 millones de dólares), por lo que se deben regular y cuidar el exceso de dólares por otras operaciones.

Es un hecho que además de ser año electoral, un ruido del Banco Central relacionado a lavado de dinero, problemas de operaciones con bancos internacionales, renuncias de funcionarios, ajuste a la baja en la calificación crediticia, entre otros, podría tener un alto costo político para el Gobierno y un fuerte deterioro hacia la economía y el empleo.

Unen fuerzas NYCE y QIMA en Certificación

Quien ha fungido como un aliado estratégico en el mercado, al dar seguridad y confianza a la industria y consumidores es Normalización y Certificación NYCE, que dirige Carlos Pérez, al ofrecer servicios de pruebas de laboratorio, verificación y certificación conforme a las NOM, NMX y estándares internacionales ISO/IEC. Ahora, su visión de crecimiento trasciende fronteras al ser parte del corporativo QIMA, de Sebastien Breteau, con sede en Hong Kong.  

Esta fusión permitirá a NYCE mantener su nombre y su identidad de marca, además de que sus usuarios podrán acceder a los servicios de QIMA el cual opera en 85 países, con un portafolio que ofrece laboratorios de pruebas, inspecciones de control de calidad y auditorías de proveedores, y servicios de revisión en origen para ayudar a eliminar los costos y reducir la duración de la estancia de la mercancía en los puertos mexicanos. 

Mediante la expansión de sus operaciones esperan crecer juntos tanto en América Latina, a nivel local e internacional. Cabe resaltar que NYCE tenía en mente poder unirse y trabajar de la mano de una plataforma global y así fortalecer su liderazgo en México y continuar en crecimiento, y confía que con el apoyo de QIMA podrá aumentar sus inversiones, para ampliar su gama de servicios.  

¿Y qué podrá pasar con el sector automotriz en 2021?

Según estimaciones de la Asociación Mexicana de Distribuidores Automotrices (AMDA), el 2021 podría significar un año de alto crecimiento para el sector, en contraste a la caída de 2020, la más grande en los últimos 25 años (28%). En esa misma dirección, se comportó la producción o ensamblaje y la exportación, bajando alrededor de un 20%, en ambos casos.

La confianza del consumidor se vio afectada ante la incertidumbre de un año difícil de programar en materia de presupuestos. Imagínese, por ejemplo, haber rentado un auto (leasing) durante 24 meses para no poder utilizarlo, prácticamente durante el confinamiento y el trabajo a distancia.

Si bien se prevé un crecimiento de 11.2% en las ventas, respecto al mismo periodo de 2020, la forma en que se venderán los autos durante esta época ya se puede ver. Los sitios de Internet de las marcas se han sofisticado mucho, al tiempo que simplifican la navegación para configurar el modelo “personalizado”, mientras los pisos de demostración cada vez lucen más tristes y abandonados.

La oferta y las tendencias son más variadas que nunca, donde se sigue fortaleciendo y crece el mercado de los autos eléctricos e híbridos, autos todo propósito y los de lujo, prácticamente toda la gama de autos ligeros, alcanzando las flotillas. Lo que es un hecho es que a finales del año pasado, el parque vehicular envejeció unos cuántos meses y la cadena de valor se vio afectada en cuanto al servicio y mantenimiento.

                                                                                                               @1ahuerta