El Instituto Nacional Electoral se encuentra bajo asedio y ha sido blanco de presiones que podrían debilitarlo, aún más, rumbo a las elecciones más grandes en la historia del país, a las cuales llega con menos recursos que en 2018 –con la elección presidencial– y el encargo de una consulta para la que no se otorgó ni un solo peso.

Si bien, el órgano autónomo también ha incurrido en decisiones que en apariencia exceden sus facultades, desde los tres Poderes de la Unión han salido “golpes” contra algunos de los miembros del Consejo General del INE.
Los jaloneos con el Congreso han sido por presupuesto e intentos de modificar la ley una vez iniciado el año electoral, o interpretaciones sobre la reelección de los diputados, entre otros.

Por su parte, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación tomó medidas que atan las manos a los consejeros para sancionar la violación de la equidad electoral.
…Y desde su conferencia mañanera, el Presidente revivió un caso que ya había sido usado por el priismo para acusar a Lorenzo Córdova de “clasista” y “racista”, basado en una grabación ilegal al consejero Presidente del INE, en donde se refería a la forma de hablar del líder de un grupo indígena.

“¿Cómo se atreven?”
El reciente establecimiento de una medida de apremio contra los integrantes de la Comisión de Quejas del INE, por la medida cautelar en la que se pide al Presidente abstenerse de hacer declaraciones que rompan la equidad en la elección de 2021 abre la posibilidad para que desde sus respectivos cacicazgos, alcaldes y gobernadores u otro servidor público tengan un pretexto para interferir de forma abierta en la contienda.

La “medida de apremio” contra los integrantes de la comisión parece más un regaño por atreverse a señalar al Presidente, cuando había ya varias expresiones que encendieron la alerta sobre los excesos del Ejecutivo en las declaraciones de su conferencia mañanera.
Tres días seguidos –del 27 al 30 de noviembre– Andrés Manuel López Obrador se refirió a la posibilidad de una alianza entre el PRI y el PAN colocándose en una posición contraria a esa decisión y descalificándola, con lo que, para algunos especialistas violó los artículos 41 y 134 de la Constitución que garantizan los principios de imparcialidad y equidad de las contiendas electorales. Y, más aún, para el TEPJF no fue suficiente revocar la resolución del INE, sino que, además tuvo que “castigar” a quienes la emitieron.


#LoboSapiens
Es en este contexto que desde la Presidencia se solicita al INE y a los partidos políticos renunciar a sus tiempos oficiales, en los que deberían presentar a los ciudadanos propuestas y programas, para que sean usados con mensajes relacionados con la pandemia. Una petición similar se hizo durante el Gobierno de Enrique Peña Nieto, en 2017 a propósito de los sismos, pero en aquella ocasión el representante de Morena en el INE lo rechazó, porque, aseguró que era un acuerdo, en apariencia noble, que podría estar “encerrando una serie de trampas para los partidos y una serie de trampas para el propio instituto”.

 

                                                                                                         @chimalhuacano