tabaco

Desde el 2008 que se creó la Ley General Para el Control del Tabaco ha habido más de 70 propuestas para esa legislación y aún hay resistencia en el Congreso para aprobarla, lo que refleja que hay muchos intereses económicos detrás, de acuerdo con Erick Antonio Ochoa, presidente y director de Salud Justa Mx.

“No ha sido fácil, hay mucha oposición en el Congreso, especialmente en las últimas iniciativas. La Mesa Directiva que dirige la Diputada Dulce María Sauri, que es del PRI, ha estado dando los turnos más complicados que se han visto en los últimos años. No solamente le da el turno a la comisión de Salud, sino a la Comisión de Economía y a la de Agricultura, o sea, con ganas de que esa regulación no pase”, explicó a 24 HORAS.

Aseguró que hay intereses económicos muy poderosos detrás de la negativa a esta ley.

“Somos actualmente el décimo mercado mundial por volumen de cigarrillos consumidos. Por eso a Philip Morris, a British American Tobacco, que son las dos empresas más dominantes en el mercado, que controlan alrededor del 95% del mercado de cigarrillos en México, les preocupa cualquier posible cambio que haya en las políticas públicas” dijo.

En tanto, Benjamín González, Director de la iniciativa México sin Humo, enfatizó que persisten lagunas en la reglamentación para proteger a fumadores y no fumadores.

“Son poco más del 50% de la población que está protegida por leyes locales, pero no existe un ley nacional que proteja a todos los ciudadanos”, señaló.
En la última Encuesta Nacional de Adicciones se habla de que hay 9.8 millones de personas que estamos expuestos al humo de cigarro en nuestra casa, dijo.

“Hay en total 40 millones de personas que están expuestas al humo de cigarro de segunda mano. Este es un número altísimo y gravísimo, porque aparte aproximadamente y tomando un símil mundial de este comparativo, el 30% son niños”, explicó el Director de México sin Humo.

Para disminuir la incidencia de este problema de salud, tanto Salud Justa Mx como México sin Humo lanzaron campañas de información, por ejemplo, la llamada “El cigarro abre la puerta al COVID-19”, que pretende evidenciar que fumar aumenta la posibilidad de contagiarse de coronavirus.

Además para contribuir a que este problema de salud disminuya, México sin Humo lanzó desde agosto una campaña centrada en en tres políticas públicas: Que los espacios cerrados sean 100% libres de humo a nivel nacional, que los productos de tabaco cuenten con un empaquetado neutro, y que la promoción, publicidad y patrocinio de los productos derivados del tabaco se elimine.

“Muchas veces lo ha mencionado el Comisionado contra las Adicciones, Gady Zabicky, y parece que hay ciertas tiendas que tienen como un altar de los cigarros y tú ves todas estas etiquetas y cajetillas florida, que son realmente una forma de seguir atrayendo a los jóvenes”.

“También está el tema de prohibir todo tipo de promoción, publicidad y patrocinio. La verdad México ha tenido un gran avance en ese sentido; ya no hay publicidad en medios masivos como televisión y radio, sin embargo hay todavía muchas de las llamadas lagunas.

Por ejemplo, se supone que las revistas que pueden anunciar este tipo de productos son las revistas para mayores de 18, pero son revistas que la leyenda de ‘para mayores de 18 años’ aparece en la esquina de más abajo junto al código de barras, donde no sabes que es para mayores de edad.”

“La cuarta política que es muy importante y la más efectiva a nivel mundial es implementar los impuestos para el tabaco, o sea, a medida que se han ido incrementando, se ve una disminución en el consumo”, detalló Benjamín González.