Probablemente no volvamos a ver a Michael J. Fox en películas o series, ya que el actor conocido por su papel de Marty McFly, en la saga Volver al Futuro, escribió en su libro “No Time Like the Future” que se retira de la actuación una vez más por problemas de salud.

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“Hay un tiempo para todo, y mi tiempo de dedicar una jornada laboral de doce horas y memorizar siete páginas de diálogo, dejarlo atrás es mejor para mí”, escribe Fox. “Al menos por ahora… entro en una segunda jubilación. Eso podría cambiar, porque todo cambia. Pero si éste es el final de mi carrera como actor, que así sea”.

A principios de los años 90, el actor fue diagnosticado con Parkinson cuando tenía 29 años, aunque hizo público el diagnóstico hasta 1998 lo que lo llevó a crear la Fundación Michael J. Fox. La cuál se dedica a “encontrar una cura para la enfermedad del Parkinson por medio de una agenda de investigación financiada enérgicamente y a garantizar el desarrollo de terapias mejoradas para quienes viven con esta enfermedad en la actualidad”, según se lee en su página.

En sus historias personales, Fox también habla sobre su lucha con el alcoholismo, recordando que su hijo Sam le dijo “que sus primeros recuerdos incluyen ir al refrigerador a conseguirme cervezas”. Desde entonces, Fox dejó de beber cuando su hijo tenía tres años y ha permanecido sobrio.

Su libro salió ayer a la venta y es una autobiografía en la que comparte historias personales y sus observaciones sobre la enfermedad y la salud, la edad, la familia y los amigos.