Un gol de Neymar al inicio del partido fue suficiente para que el PSG lograra el viernes una victoria 1-0 sobre el St Etienne para ganar la Copa de Francia, en una final jugada en un estadio casi vacío que estuvo marcada por la lesión en un tobillo de Kylian Mbappé tras una dura entrada.
Neymar capturó un rebote en el área para marcar en el minuto 14 después de una jugada en la que Mbappé aprovechó su velocidad para sacar un remate que fue contenido a medias por el portero Jessy Moulin.
El partido, que significó la vuelta del fútbol en el país tras un parón de cuatro meses por la pandemia de coronavirus, tuvo solo 5 mil personas en las tribunas del Stade de France, con capacidad para 80.000 espectadores, debido a los estrictos protocolos de salud.
Poco después del gol, Mbappé, de 21 años, resultó lesionado en el tobillo derecho por una brutal entrada del capitán de St Etienne, Loic Perrin, quien fue expulsado luego de una revisión del VAR tras sólo ser amonestado en primera instancia.
Durante la ceremonia de entrega del trofeo, Mbappé le comentó al presidente francés, Emmanuel Macron, que sintió un crujido pero que no creía que fuera una fractura.
“Ganamos la final y eso es lo que importa”, dijo el entrenador del PSG, Thomas Tuchel, cuyo equipo había perdido la final el año pasado ante Stade Rennes en los penales.
El PSG, que ya había ganado la liga local esta temporada, enfrentará a Olympique Lyonnais en la final de la Copa de la Liga y chocará con Atalanta de Italia por los cuartos de final de la b, en busca de un histórico póker de títulos.
EFVE