El personal de salud del Hospital Juárez de México ha confesado que debido a los casos de Covid-19 sufren de desgaste físico y emocional.

 

Asimismo, hay pacientes que salieron pero han tenido que ingresar nuevamente porque los síntomas del coronavirus han regresado.

 

Uriel es un joven de 17 años edad que fue ingresado debido al Covid-19 y lleva dos semanas internado, además es un paciente oncológico y por la pandemia se pospuso su cirugía.

 

“No quiero estar acá, nadie quiere estar acá, pero tampoco ahorita no quiere regresar a mi casa porque si sigo positivo, sigo siendo contagioso”, reveló un paciente.

 

Por otro lado, José de 25 años, quien también fue internado debido al virus, laboraba como taxista y aseguró que es muy tedioso el encierro y solamente piensa en su familia.

 

“Maldita enfermedad, ¿no?, creo que no se lo deseo a nadie, la verdad”, compartió.

 

“Nada más estás pensando en tu familia. Soy el sostén de mi familia y la verdad es que nunca me percaté que iba a ser contagiado”, agregó José.

 

Otro es el caso de Silvia, una enfermera que revisa signos vitales y proporciona medicamento, ella explicó que en estos meses ha visto llegar personas de entre 20 y 70 años y algunos reingresan tras ser dados de alta.

 

“También hay pacientitos que son jóvenes, pero que están graves y también han fallecido. No puedo tener espacio para un error porque desafortunadamente ese error va a repercutir en la salud o hasta en la vida de mi paciente”, comentó la enfermera.

 

Hasta el momento, la Secretaría de Salud reportó 6 mil 19 nuevos casos y 790 decesos, sumando 41 mil 190 fallecimientos en total en el país, mientras tanto, los médicos se encuentran frustrados y cansados.

 

 

El Hospital Juárez de México ha alcanzado hasta 95% de ocupación y el personal médico confiesa que si da coraje que las personas no tomen las precauciones básicas tras el regreso a actividades, pues muchos no usan ni el cubrebocas o respeta la sana distancia.

 

“El personal de enfermería se encuentra ya a esta altura agotado, físicamente, emocionalmente. No salimos a desayunar, tampoco salimos a hidratarnos”, señaló Lucía, enfermera de terapia intensiva.

 

“Hay gente que sigue pensando que es mentira. Ver que ya están en las plazas, con los niños en las fuentes, pues sí da un poco de coraje a la vez”, comentó María, enfermera de hospitalización por Covid-19.

 

Con información de Noticieros Televisa

 

PAL