Foto: Atsuo Fujimaru / Minden Pictures En Japón cada año causa alrededor de 50 muertes debido a su potente veneno, el cual contiene neurotoxina, sustancia que podría provocar un paro cardíaco y un shock anafiláctico  

En los últimos días, EU ha reportado casos de avistamientos del avispón asiático gigante, apicultores están preocupados por la protección de colmenas de abejas.

 

En medio de la pandemia del Coronavirus, un nuevo temor empieza a preocupar a ciudadanos en EU.

 

¿Qué es el avispón asesino?

 

Es un tipo de avispón gigante proveniente de Asia, que tiene una longitud de 5 cm. Es corpulento y posee un potente veneno capaz de disolver los tejidos. Es agresivo y, a diferencia de los abejorros, no tolera el cautiverio. Además, dispone de unas mandíbulas potentes.

 

Tanto científicos como apicultores temen a que ésta especie asiática pueda acabar con las colmenas de abejas, al ser consideradas como su fuente principal de alimentación.

 

La potente fuerza de su mandíbula puede llegar a decapitar en instantes a las abejas y aunque desecha esta parte de su cuerpo, el resto lo lleva como comida a sus crías.

 

Recientemente, medios locales relataron el caso de Conrad Berube, apicultor y entomólogo, que descubrió “miles y miles” de sus abejas decapitadas, por lo que se dio a la tarea de investigar sobre las causas.

 

El “avispón asesino” se caracteriza por tener una coloración naranja y café oscuro.

 

En Japón cada año causa alrededor de 50 muertes debido a su potente veneno, el cual contiene neurotoxina, sustancia que podría provocar un paro cardíaco y un shock anafiláctico, en el que se produce una disminución de la presión arterial con el riesgo de perder la vida.

 

“Esta es nuestra última ventana para evitar que se establezca”, aseguró Chris Looney, entomólogo del Departamento de Agricultura del Estado de Washington.

 

El objetivo del departamento es atrapar a todos los insectos lo antes posibles para evitar la erradicación masiva de abejas.

 

Hasta el momento, los científicos desconocen cómo el insecto llegó al continente.

 

 

AR