Estados Unidos, convertido ahora en el principal foco de contagios de Covid-19, no parece interesado en cesar la política antiinmigrante impulsada por Donald Trump desde hace tres años, aunque algunos sondeos parezcan apuntar hacia una disminución en su popularidad, alerta Allert Brown-Gort, director general de la Casa de la Universidad de California en México.
De hecho, hace un par de semanas, cuando la epidemia se hizo más presente en la nación americana, el presidente republicano endureció los controles fronterizos, algo que terminó por proteger más a mexicanos y canadienses, pues los casos en EU comenzaron a dispararse hasta llegar a desbancar las cifras de China, donde se originó la nueva cepa, y a los países europeos con mayores afectaciones por el mal, como Italia y España.
Aunque aún queda mucho por definirse en el tablero mundial, el efecto inesperado para la administración Trump puede ser que las decisiones que tome se reviertan hacia sus propios intereses electorales, y que en noviembre estén mejor posicionados aquéllos quienes combatieron al virus desde la primera línea, como algunos gobernadores.
“Cuando hay miedo, la gente tiende a ser más conservadora. El único problema es que la respuesta del Presidente fue tan inepta, que dudo mucho que le vaya a redituar. Se le fue la oportunidad”, apunta Brown-Gort.
Trump pugnó durante varios días, antes de la explosión potencial de enfermos en EU, por retomar las actividades económicas lo antes posible, a pesar de los llamados a ampliar las restricciones y la cuarentena.
“Lo que él quería era proteger más a la Bolsa, porque él entiende la economía con respecto a la Bolsa, pero hay más factores. No veo los resultados necesarios para que se reelija”, agrega el especialista en temas de migración.
En general, dice Brown-Gort, quienes más sufren son los migrantes, es una población muy vulnerable: “Es la condición que los diferencia de casi todo; que no tienen todos los papeles, y si tienen todos los papeles no tienen todos los derechos, y muchos se los cortan por cuestiones políticas o sociales, más que racionales”.
“Buena parte de la población más desprotegida en materia de salud en Estados Unidos son los migrantes”, añade, “esta administración (de Donald Trump) ha hecho más por hacerlos más vulnerables. No cabe ninguna duda que la agenda antiinmigrante sigue en pie, a pesar de la contingencia”.
En días pasados, cientos de trabajadores del sector de la agricultura que se dirigían de México hacia Estados Unidos quedaron varados debido al endurecimiento de la frontera y la emisión de visas temporales de trabajo.
“Al pasar la crisis va a quedar claro -si no había quedado claro antes, no sé por qué-, que la agricultura americana depende de la mano de obra mexicana y centroamericana”, subrayó el también académico del ITAM.
LEG