Foto: Cuartoscuro/ Archivo Semana Santa es la semana de celebraciones más importante durante el año litúrgico de la Iglesia  

La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) señaló que los religiosos deben reconocer e interpretar los signos de los tiempos, creando conciencia en el pueblo de que esta pandemia (Covid-19) es real y que, tristemente, ha llevado a la muerte a miles de personas en el mundo.

 

“Esto no significa crear pánico, sino cuidar de nosotros, como Cristo mismo nos cuida, y promover en nuestros hermanos los cuidados precisos”, manifestó Monseñor Rogelio Cabrera López Arzobispo de Monterrey y presidente de la CEM.

 

Resaltó que se inició la semana de celebraciones más importante durante el año litúrgico de la Iglesia. La Semana Santa.

 

“Bien sabemos que este año, no podremos estar físicamente en los templos, por lo que les reitero la invitación para que sigamos, con fe y devoción, las transmisiones que, en nuestra Arquidiócesis, sacerdotes y obispos, estamos realizando para fortalecer los lazos de unidad”, detalló el Arzobispo.

 

Indicó que esta situación no debe entristecer a los fieles , ya que es algo pasajero y pronto, “con la ayuda de Dios y nuestro esfuerzo al atender las indicaciones que nos han dado, podremos volver a reunirnos, manifestando, todos juntos, la alegría de la resurrección del Señor”.

 

Abundó que mucho se puede hacer desde los hogares, incluso ayudar a quienes viven situaciones precarias y pidió sumarse a las actividades que Cáritas de Monterrey está realizando para socorrer a quienes sufren por esta crisis.

 

“Este domingo, deseo compartirles mi VII carta pastoral, que dirijo especialmente a mis hermanos sacerdotes, animadores de esperanza, con motivo de la celebración del Jueves santo. Queridos sacerdotes: La situación que estamos viviendo en el mundo, es histórica y debemos aceptarla con los desafíos que presenta, dando una respuesta de esperanza al pueblo que nos ha sido confiado”, refirió el Arzobispo.

 

Destacó que el Papa Francisco, los anima a no desfallecer y recordar que son servidores, sacerdotes del Señor y es su tarea hacerlo presente en medio de esta tempestad.

 

CS