El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau informó este sábado que su gobierno no tomará represalias contra Estados Unidos, luego de que el presidente del país informara que impediría la exportación de mascarillas a Canadá y América Latina.
Trudeau aseguró que en los siguientes días hablará directamente con el presidente estadounidense, aunque detalló que su equipo sostiene “conversaciones constructivas” con funcionarios del gobierno de Trump; además, destacó que la decisión sería perjudicial para ellos.
El primer ministro enfatizó que la medida “es un error” y dijo que aunque “Canadá podría tomar represalias, como impedir que miles de asistentes médicos canadienses vayan a trabajar a los hospitales de Detroit”, no lo hará porque “sabemos que a nuestros países les interesa cooperar”.
Asimismo, recordó que la materia prima con la que se fabrican las mascarillas N95 proviene de Canadá, “en su totalidad”. Informó, además, que en las próximas horas llegarán millones de mascarillas provenientes de China.
Durante esta semana, el mandatario estadounidense prohibió a una importante empresa del país que venda mascarillas médicas N95 y guantes quirúrgicos al extranjero, sin antes abastecer por completo la demanda de Estados Unidos.
La medida de Trump se sustentó en la Ley de Producción de Defensa de 1950, mediante la cual el gobierno federal tiene “el poder” de instruir a los fabricantes que suministren al país de todo el equipo que se necesite, anteponiendo a cualquier requerimiento extranjero.
Por su parte, la empresa a la que Trump ha impedido vender insumos a otros países dijo que es necesario considerar las implicaciones humanitarias que tendría dejar de vender mascarillas N95, así como respiradores.
ica