El Departamento vasco de Salud amplió el cese de actividades para evitar la propagación del coronavirus al decretar el cierre de todos los centros educativos de las comunidades de Madrid y La Rioja.

El presidente del Gobierno Pedro Sánchez recomendó a todos los ejecutivos regionales suspender las clases y a lo largo de la tarde todos fueron anunciando que asumían la recomendación del Gobierno central.

La medida afecta a más de nueve mil estudiantes: 8.217.000 escolares y 1.335.000 universitarios presenciales. Otras 237.000 personas están matriculadas en grados y másteres online, por lo que no se ven afectados por el aislamiento.

La suspensión de clases afecta a escuelas infantiles, colegios, institutos y universidades. El Gobierno de Castilla y León aprueba la medida mañana y no sabe cuándo entrará en vigor.

Los dos millones de estudiantes andaluces, la mayor comunidad del país, dejarán de acudir a clase a partir del próximo lunes.

 

aarl