La directora general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Blanca Jiménez Cisneros y el gobierno de Chihuahua, se reunirán para negociar más opciones antes de abrir compuertas de la presa La Boquilla, ubicada en el municipio de Camargo.

La reunión se acordó realizarla para ayer por la tarde y acudirían el director ejecutivo de la Junta Central de Agua y Saneamiento, Oscar Ibáñez Hernández y el secretario de Desarrollo Rural, René Almeida Grajeda.

El conflicto inició cuando el gobernador, Javier Corral, adelantó que propondrá que el pago del Tratado Internacional de Aguas se haga con escurrimientos naturales de las lluvias de la entidad durante los próximos meses, sin extraer agua de las presas, para no poner en riesgo el ciclo agrícola de los productores de Chihuahua.

El martes, la administración estatal pidió a la Conagua no abrir las compuertas de la presa para el cumplimiento de dicho acuerdo internacional.

Productores y agricultores han señalado que dicha medida afectaría el riego de sus cultivos, por lo que desde el lunes se apostaron en las inmediaciones de la presa para impedir las acciones de la dependencia.

De acuerdo con la titular de la Conagua, Blanca Jiménez, actualmente México tiene un adeudo 220 millones de metros cúbicos de agua, que debe cubrir a más tardar en octubre de 2020, adicionalmente a los 432 millones de metros cúbicos del quinto año del ciclo que establece el Tratado Internacional de Aguas de 1944.

Por su parte, el gobernador dijo que la intención de Conagua es extraer mil millones de metros cúbicos a la presa La Boquilla, pero consideró que no hay posibilidad de sacarle más de 500 millones de metros cúbicos porque entonces se pondría en riesgo el ciclo agrícola, que necesita mil 80 millones de metros cúbicos este año.

Señaló que la fecha límite para pagar la cuota de agua es el 24 de octubre, por lo que en ese lapso se podría cubrir con lo que se registre de lluvias.

LEG