Entre empujones, asume Rosario Piedra
Con una estrategia finamente planeada, la bancada de Morena y sus aliados del PES, PT, PVEM y el respaldo del PRI lograron que Rosario Piedra Ibarra rindiera protesta, a pesar de los gritos y empujones, como nueva presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) para el período 2019-2024.
Por la mañana, el presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) y coordinador de los senadores de Morena, Ricardo Monreal, anunció que había propuesto a su bancada reponer la votación por la cual fue electa la activista, y con ello evitar el estigma de su bancada de rateros, fraudulentos y tramposos.
Minutos más tarde, al menos 28 senadores de Morena, encabezados por Eduardo Ramírez, anunciaron que para evitar dudas habían decidido “respaldar, que se oiga muy bien, respaldar la decisión del coordinador. Vamos a ir a una reposición, a una reposición del procedimiento para elegir a la nueva presidenta de la CNDH”; no obstante, votaron en contra de su propio anuncio.
La bancada del PRI también votó en contra de la propuesta bajo el argumento –en voz del senador Jorge Carlos Ramírez Marín– de que no permitirían “legitimar un procedimiento que se llevó a cabo con errores graves, particularmente en el cómputo” y pidieron reponer por completo el procedimiento y no sólo una votación; decisión que de manera indirecta ayudó a que Rosario Piedra asumiera su cargo.
La también senadora priista, Claudia Ruiz Massieu, advirtió que la política para construir, requiere de diálogo, “requiere de acuerdos y requiere de confianza, y la confianza en esta Cámara de Senadores ha quedado tocada”.
Ante el resultado: 46 a favor (del PAN, PRD, PT y MC), 66 en contra (Morena, PVEM, PRI y PES) y 9 abstenciones de Morena, entre ellos la presidenta de la Mesa Directiva, Mónica Fernández, los senadores del PAN desplegaron una enorme manta al interior del pleno con la leyenda “Aquí Morena roba votos, no al fraude en la CNDH”.
La toma de protesta de Piedra Ibarra se registró entre golpes, empujones, descalificaciones y gritos, las senadoras de Morena Martha Guerrero, Soledad Luévano y Citlalli Hernández empujaron, aventaron y tiraron al senador del PAN, Gustavo Madero, quien se encontraba en la tribuna y tuvo que agarrarse de la presidenta de la Mesa Directiva, Mónica Fernández para permanecer de pie, lo cual no logró.
El enfrentamiento llegó a los golpes entre los senadores Salomón Jara y Ricardo Moreno de Morena, por lo que tuvo que meterse en defensa de su compañero, el coordinador de los panistas, Mauricio Kuri acompañado de Julen Rementería y Raúl Paz.
“Es un día catastrófico para la democracia este día (…) estos güeyes todos los días en todos los frentes que están abriendo se les está saliendo de control”, declaró Gustavo Madero, luego de la agresión.
Afirma Rosario que será imparcial
La nueva presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, Rosario Piedra Ibarra, garantizó que a pesar de las descalificaciones al proceso por el cual fue electa, su gestión será imparcial.
“Si tienen ellos alguna duda de mi imparcialidad que no la tengan, no le voy a fallar a nadie”; e invitó a los senadores del PAN “que me estuvieron impugnando por aquí quiere ir a poner una queja bienvenido porque todos los ciudadanos van a ser escuchados”, advirtió Piedra Ibarra.
A pregunta expresa de si ya renunció a su militancia de Morena, respondió que hoy envió una solicitud de licencia al partido político fundado por el actual Presidente.
Aseguró que los golpes, gritos y descalificaciones registrados durante su toma de protesta, no le resta a su nombramiento, “aquí se vivió una experiencia democrática donde se fundamentó muy bien, porqué es legítima y legal mi elección al cargo de esta presidencia de la Comisión Nacional de Derechos Humanos” y agradeció a los senadores que votaron por ella su voto a favor.
LEG