Cuando nos quedan dos jornadas, el Santos de la Comarca Lagunera es prácticamente el líder general del torneo y por lo tanto, sin duda, el gran favorito al título de nuestro futbol, pero para ello deberá dejar atrás aquello que ya muchas veces sucedió que el número uno de la tabla pierde en la Liguilla.

 

Creo que terminar al frente de las puntuaciones, sería un justo premio para los de Torreón, porque han tenido la regularidad y consistencia necesaria para ello, superando equipos que precisamente sus altibajos los tienen abajo de ellos en la tabla.

 

Les faltan dos juegos para cerrar el torneo: de local contra Cruz Azul y de visita ante Toluca. Por ahora sus números son muy equilibrados con 33 puntos que los convirtieron en el primer calificado a fase final, con 10 juegos ganados, 3 empatados y 3 derrotas, con una poderosa ofensiva comandada por Julio Furch de 35 goles a favor por 22 en contra, con una defensiva donde Jonathan Orozco, su portero, es básico.

 

A mediados del torneo, en este mismo espacio hablamos que se perfilaba una final muy agradable por sus estilos de juego entre ellos frente al León, la cual aún es muy posible. Los esmeraldas han sido menos regulares, pero podrían ser ellos aún el gran rival, llegando a esa posible final ya sin la presión del torneo anterior de ser líderes generales y dejándola en los muchachos de la Comarca.

 

La jornada anterior se jugaron el liderato ante el América y no sólo salieron vivos del Azteca, sino victoriosos y con la moral por los cielos.

 

El señor Guillermo Almada tiene un equipo equilibrado, que de local se hace muy fuerte, donde el charrua Lozano es a mi entender la figura clave.

 

Encontrando en el mexicano y gran valor juvenil Adrián Lozano su gran aliado.

 

El gol le toca a Julio César Furch, quien en sus inicios jugara en su etapa de formación en su natal Argentina bajo las órdenes de Gustavo Pedro Echaniz, aquel eje de ataque que jugó con América y Querétaro. Pues bien, el alumno superó al maestro. Su futbol va a la alza, porque ha logrado superarse de aquel que llegó a México con el Veracruz de Carlos Reinoso.

 

En defensa su arquero Orozco es una gran seguridad, pero además el joven Acevedo está listo para cualquier urgencia con Doria trabajando muy bien en la linea de zagueros.

 

De visitante es un equipo que no se regala al ataque, que junta sus líneas y tiene gran velocidad en el contra ataque y también son rápidos en el repliegue, las hoy llamadas transiciones ofensivas y defensivas.

 

Ahora bien, la Liguilla, por muy trillado que suene y muchos críticos no lo acepten, es otra cosa, un torneo nuevo y diferente. La forma de jugar de Santos parece ideal para la enfrentarla, pero veremos si lo logran hacer contra algunos que son especialistas, como el actual campeón Tigres o el América que no se le puede descartar, y que decir del ya mencionado León, que debió aprender la lección, sin olvidar al Necaxa que tiene en Memo Vázquez un hombre conocedor de esas fases finales.

 

Santos es pues prácticamente el uno, ¿logrará matar esa historia, o volveremos a ver al equipo más regular del certamen perder el título de campeón en la fase final?

 

 

 

jhs