En medio de la renuncia al liderazgo del sindicato de Pemex, Carlos Romero Deschamps ha evitado hacer declaraciones públicas que puedan ser tergiversadas y utilizadas en su contra.
El ex líder del sindicato petrolero ha sido acusado por diversas figuras políticas de “saquear a Pemex” para mantener un estilo de vida ostentoso para él y su familia. Así como de desvío de recursos para apoyar campañas políticas como la del ex candidato a la presidencia por el PRI, Francisco Labastida.
A pesar de lo que le puedan adjudicar a Deschamps, Paulina, su hija, ha evitado ser discreta en el presumir los lujos que usufructúa a costillas de las aportaciones de los más de 200 mil agremiados al Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana.
Es bastante fácil darse una vuelta en internet para poder verla de viaje en Europa, alguna playa exótica, abordo de un jet privado, dentro de algún hotel de lujo o de visita en algún lugar recóndito del planeta.
Es presumible la acreditación de este estilo de vida opulente; sin embargo, un amplio sector de la población se siente ofendido al tomar en cuenta que México es un país con los mayores índices de desigualdad en el planeta y que según la UNICEF, uno de cada dos niños son de escasos recursos, dónde el 20% de estos viven en pobreza extrema.
jhs