Foto: Cuartoscuro Los actos violentos observados este viernes entre grupos del SME afuera de su sede son el reflejo de malestares acumulados hacia el actual secretario general de esa agrupación, Martín Esparza Flores  

Los actos violentos observados este viernes entre grupos del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) afuera de su sede son el reflejo de malestares acumulados hacia el actual secretario general de esa agrupación, Martín Esparza Flores.

 

De acuerdo con José Antonio Almazán, ex secretario del Exterior del SME, el enfrentamiento entre electricistas tiene su origen en la inconformidad acumulada por presuntas negociaciones que Esparza Flores realizó en 2015 con el gobierno de Enrique Peña Nieto, tras la extinción de la compañía Luz y Fuerza del Centro (LyFC).

 

Expuso que otro detonante es el malestar que emanó de las elecciones de junio pasado para renovar a la mitad del Comité Central, proceso que derivó en una demanda ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje pues la disidencia aseguró que se cometió fraude.

 

En entrevista, Almazán justificó así que la tarde de este viernes, mientras los electricistas y simpatizantes de Martín Esparza realizaban un foro de solidaridad en las instalaciones del SME, un grupo de la oposición se apostó en inmediaciones del recinto sindical y lanzó piedras contra el inmueble, acción que fue repelida por el bando contrario con cohetones.

 

En medio de la confrontación, el bloque disidente también coreó consignas como: “Fuera charros del SME” y “¡SME sin Martín, SME sin Martín!” desde la avenida Insurgentes, esquina con Antonio Caso.

 

El pleito se veía venir desde un día antes, como se comprueba en un oficio que el grupo de Martín Esparza entregó a la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHCDMX) este 26 de septiembre.

 

En ese documento, el líder de los electricistas pide la CDHCDMX intervenir de manera preventiva en la marcha que realizarían a las 16:00 horas hacia el Zócalo, en conmemoración del 59 aniversario de la nacionalización de la industria eléctrica.

 

La petición advertía que un grupo político de la disidencia, “a través de redes sociales y en medios de comunicación ha amenazado reiteradamente con obstruir la movilización y evitar de manera violenta nuestra llegada al Zócalo, amenazando con agredir físicamente o incluso atentar contra la vida de los miembros de la dirección del SME, alentando a sus seguidores a actuar de la misma manera”.

 

La mañana de este viernes el grupo disidente realizó una movilización denominada “¡Trabajo digno para todos!”, en el que cargaban una manta con la fotografía de Martín Esparza y la leyenda “se busca por traidor y ratero”.

 

Este grupo encabezado por Jorge Sánchez García entregó un documento supuestamente respaldado por 32 mil firmas en el Palacio Nacional donde solicitó al presidente Andrés Manuel López Obrador apoyo para concretar la renovación de la dirigencia de la organización gremial.

 

José Antonio Almazán recordó que tras la extinción de LyFC, concretada en octubre de 2009 con Felipe Calderón como presidente, Martín Esparza habría negociado con la Secretaría de Gobernación de Peña Nieto un pasivo laboral de más de 80 mil millones de pesos a cambio de activos con los que haría un negocio por 30 años.

 

También aseveró que, de acuerdo con información obtenida por trasparencia, el actual dirigente pactó liquidaciones millonarias para él, su familia e integrantes de la dirección sindical.

 

A través de un audio difundido en Youtube, Martín Esparza advirtió que presentarán denuncias penales contra el grupo que los agredió esta tarde, entre los que aseguró hay “gente ajena”.

 

Respecto de las acusaciones en su contra, señaló que tras la disolución de LyFC el bloque que él representa combatió por todos los medios el ilegal decreto y aguantó la represión del Estado.

 

“Hoy en día, dígase lo que se diga, el SME mantiene su Registro Nacional de Industria, evitamos la disolución forzada de nuestro glorioso SME”, dijo.

 

Sobre la disidencia, refirió que “estos grupos saben de antemano que cobraron su liquidación, que renunciaron a la protección de la justicia por parte de nuestra organización sindical”, y llamó a mantener la calma y la unidad.

 

“Vamos a mantener nuestra unidad, vamos a defender nuestra organización sindical y le exigimos al gobierno de la República que atienda el fondo del conflicto, que es el despido injustificado de todos los trabajadores agremiados al SME”, declaró.

 

 

 

fahl