Formalizada la Guardia Nacional y resuelto el problema de los policías federales, llegó la hora a las Policías locales: estatales y municipales. El esfuerzo será mucho mayor al realizado hasta ahora a nivel federal, porque resulta que tendrá que lidiarse con 32 Policías estatales y más de dos mil municipios con policías construidos como células de poder político y criminal.

Hasta ahora no se cuenta con un padrón real de Policías locales; se carece de un diagnóstico de estado por estado y de municipio por municipio de esas fuerzas de seguridad, y nunca se había efectuado un esfuerzo por poner orden en esas áreas.

En los transitorios de la Guardia Nacional aprobados a finales del año pasado se dio a gobernadores y alcaldes un plazo de seis meses para entregar un diagnóstico de sus fuerzas de seguridad y sus planes estatales y municipales de seguridad.

Pero nadie cumplió.

Ahora le corresponderá al Gobierno federal llevar a cabo, cuando menos, un estudio generalizado. O, de plano, partir de cero: que todas las Policías estatales están mal estructuradas, contaminadas por el crimen organizado local y sin posibilidad de rescate.

Pero como no será posible renovar los 385 mil policías estatales y municipales, entonces su capacitación tardará años, requerirá un esfuerzo salarial sin precedente y habrá que dedicar a buena parte del personal de la Guardia Nacional a supervisar a los vigilantes locales.

El modelo policial aprobado por la Secretaría federal de Seguridad y Protección Ciudadana es óptimo en tanto que teórico. Pero se necesitará de un esfuerzo hercúleo para comenzar de cero. Y quedan todavía las dudas federales de que gobernadores y alcaldes en realidad sí quieran profesionalizar a sus Policías porque son cuerpos políticos de seguridad de los grupos de poder, no defensores de los ciudadanos.

Pero por algo se empieza. Y puede haber muchos funcionarios locales atropellados.

Zona Zero

Dos datos llegados de los Estados Unidos. El capo Joaquín el Chapo Guzmán fue sentenciado a prisión de por vida, y una vez muerto todavía le endilgaron 30 años más de cárcel. Y las autoridades estadounidenses señalan que la fortuna del narcotraficante podría ser de más de 16 mil millones de dólares… que no se encuentran.