Foto: Especial Eruviel Ávila reconoció el trabajo del equipo negociador, empresarios y legisladores que participaron para concretar el acuerdo  

El senador Eruviel Ávila Villegas, a nombre del Grupo Parlamentario del PRI, hizo votos para que el T-MEC contribuya al desarrollo regional y se traduzca en beneficios tangibles para todos los mexicanos.

 

“El libre comercio en América del Norte ha significado millones de empleos para la población de esta región. No estaríamos aquí reunidos discutiendo un dictamen sobre la modernización del instrumento de libre comercio con Estados Unidos y Canadá si no reconociéramos los beneficios que el mismo ha traído para los tres países”, manifestó al emitir el posicionamiento del grupo parlamentario.

 

El senador hizo un reconocimiento al equipo que llevó a cabo las negociaciones del T-MEC, tanto de la anterior como de la actual administración federal, como el subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Jesús Seade, y los empresarios que estuvieron cerca; así como las Comisiones Unidas que analizaron y aprobaron este instrumento.

 

“Estoy convencido que siempre se tuvieron como prioridades fortalecer la competitividad de América del Norte, avanzar hacia un comercio regional inclusivo y también responsable, así como aprovechar las oportunidades de la economía actual para promover la certidumbre y las inversiones en la región.

 

Eruviel Ávila dijo que con la aprobación del T-MEC quedan varios compromisos internos sobre la mesa, pues México tiene que ser competitivo por la calidad de sus trabajadores y no porque ganen menos de lo que ganan en otros países de la región; tiene que seguir fortaleciendo la competitividad de nuestra gran industria exportadora, así como de la pequeña y mediana empresa, y tiene que implementar una amplia estrategia de capacitación laboral, en donde los sindicatos van a jugar un papel muy importante.

 

Destacó que el Tratado de Libre Comercio para América del Norte ha permitido integrar una región en la que habitan más de 480 millones de personas, que genera el 28 por ciento del Producto Interno Bruto mundial y donde se realiza el 16 por ciento del comercio global.

 

A 25 años de su implementación, el rostro y la estructura de la economía mexicana se transformaron, pues en 1994 México era como todos los demás países de América Latina, un exportador de materias primas, y el 80 por ciento de su comercio exterior era el petróleo, que hoy en día representa solo el 10 por ciento.

 

“Después de 25 años los resultados están a la vista. Nuestras exportaciones han crecido en casi 600 por ciento, siendo el sector manufacturero el más dinámico. El PIB de México ha crecido casi 74 por ciento a partir de la firma del Tratado, y la inversión extranjera directa ha crecido casi 7 veces”, expuso.

 

El legislador sostuvo que el Tratado logró ser el trampolín para la expansión de cientos de empresas mexicanas, no solo en la región de América de Norte, sino también en el resto del mundo, y México se ha posicionado en los mercados globales, además de tener acceso a bienes y servicios de calidad a precios competitivos.

 

 

fahl