No hace falta ser uno de los expertos en economía y finanzas que consulta mensualmente el Banco de México para responder que la economía estaba mejor hace un año que en este momento.

Pero si de expertos se trata, el cien por ciento de los que consulta el banco central considera que estábamos mejor en términos económicos hace 12 meses.

El pronóstico que hacen los especialistas es que la economía mexicana habría entrado en un estancamiento, donde 62% de los encuestados cree que se mantendría igual, contra 32% que anticipa un empeoramiento de las condiciones económicas y sólo 5% de expertos que cree que la condición de la economía mexicana habrá de mejorar.

Seis de cada 10 consideran que es mal momento para realizar inversiones productivas en el país, y no hay uno solo de estos expertos que dan forma a la encuesta mensual sobre las expectativas del Banco de México que crea que éste es un momento adecuado para invertir.

Es por eso que no ven los encuestados que la economía mexicana pudiera tener el repunte económico prometido por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Pero no lo ven ni este, ni el próximo año ni la siguiente década completa.

Para este 2019, el pronóstico del comportamiento del Producto Interno Bruto no ha dejado de caer sistemáticamente, como lo ha hecho por varios meses. Ya hay una estimación de que la economía crecerá apenas 1.35%.

Para el próximo año, el promedio de lo que esperan estos expertos apenas llega a 1.71%. Pero de aquí al año 2029 esperan un promedio de crecimiento de no más de 2.1%. Esto es totalmente contradictorio con la visión presidencial de crecer 4% en promedio, con excepción de 2024, cuando el Presidente promete 6%.

Ante los ojos de los expertos esto es simplemente imposible, porque no hay a la vista los motores de crecimiento que permitan pensar en un despegue del PIB mexicano.

Durante algún tiempo, la economía de Estados Unidos solía ser la locomotora que jalaba a la economía mexicana. Esto no ha ocurrido en tiempos recientes, porque la estimación de crecimiento para Estados Unidos, desde esta perspectiva de los expertos consultados por el Banxico, habla de 2.4% este año.

Lo que seguramente puede ocurrir es que una desaceleración estadounidense sí influya negativamente en México.

Hay un apartado en la encuesta donde los analistas dejan los números y hacen más caso a sus corazonadas respecto a qué puede frenar el crecimiento. Y no hay duda de la mayoría en señalar el apartado que llaman gobernanza como el principal lastre.

Ahí se agrupan todos esos factores internos que le ponen piedras al desarrollo. El principal es la incertidumbre política interna. Un problema que suele manifestarse en tiempos electorales hoy está presente como el número uno a seis meses del Gobierno actual. Y claro, los temas de inseguridad interna.

En total, los factores internos constituyen 72% de las respuestas de los expertos sobre aquello que puede frenar el crecimiento. Hay, pues, razones para el pesimismo.