Los científicos encabezados por el investigador Laurent Loinard, del Instituto de Radioastronomóa y Astrofísica de la UNAM, participó en la toma de imágenes que después de casi dos años de trabajo observando la galaxia, los científicos se hicieron públicas a nivel mundial.

Además del científico Laurent Loinard, participaron en la presentación de las imágenes William Lee Alardín, coordinador de la Investigación Científica del centro académicos y Marúa Elena Álvarez-Buylla Roces, director general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).

El proyecto encargado de tomas estas imágenes es el Event Horizon Telesscope (EHT), una red de ocho observatorios ubicados en distintas partes del mundo.

De acuerdo con la UNAM, su objetivo es capturar imágenes de Sagittarius A, un agujero negro supermasivo en el centro de la Vía Lactea. También se tomaron imágenes de un agujero negro aún más masivo, a 53.5 millones de años luz, en la galaxia M87.

En abril de 2017 los distintos observatorios se unieron para observar los “horizontes de eventos” de los agujeros negros, el límite más allá del cual la gravedad es tan extrema que incluso la luz no puede escapar.

La UNAM explicó que existen dos tipos de hoyos negros, el primer tipo está el masivo, que es cuando una estrella masiva (100 veces la masa del Sol) explota y se convierte en supernova, posteriormente, su remanente, que debe ser mayor a tres masas solares, implosiona por la gravedad y se forma el hoyo negro.

El segundo tipo es el agujero negro supermasivo, con un millón de veces la masa del Sol. La cual se ubica en los núcleos de las galaxias y todavía se desconoce qué lo origina.

Los agujeros negros que se encuentran activos en muchas de las grandes galaxias que pueblan el Universo presentan un gran misterio que consiste en clarificar de dónde procede el material que los alimenta y cómo es conducido hacia su núcleo.

El crecimiento de los agujeros negros se regula por lo que “ingieren”, como ocurre con los humanos; unos miden 10 millones de veces la masa del Sol y otros 500 millones, por lo que la duda consecuente es cómo alcanzan su tamaño.

Xavier Rodríguez

Event Horizon Telescope

El Event Horizon Telescope es una colaboración internacional que apunta a capturar la primera imagen de un agujero negro mediante la creación de un telescopio virtual del tamaño de la Tierra.

Mapa

Cada sitio marca un telescopio Event Horizon. Los iconos verdes marcan los sitios actuales, los iconos púrpuras marcan los sitios futuros y los iconos azules marcan los sitios históricos.

Sitios actuales: España, Chile, México, Polo sur y en el estado de Arizona
Sitios futuros: Francia, Groenlandia y en el estado de Arizona
Sitios históricos: California y Hawai

¿Cómo se hará la imagen a partir de los datos dispersos recopilados por el EHT?

El Event Horizon Telescope (EHT) recoge la luz del agujero negro utilizando una pequeña cantidad de telescopios distribuidos alrededor de la Tierra.

Una vez que el EHT ha medido los datos del agujero negro, todavía tenemos que tomar una foto de él, un proceso denominado imagen.

La luz que recolecta da indicaciones de la estructura del agujero negro. Sin embargo, como sólo se recolecta luz en algunas ubicaciones de telescopios, todavía falta información sobre la imagen del agujero negro.

Los algoritmos de creación de imágenes que desarrollamos llenan los vacíos de datos que nos faltan para reconstruir una imagen del agujero negro.
Para el EHT, los datos que toma sólo nos dicen una parte de la historia, ya que hay un número infinito de imágenes posibles.
Al final se revisaran todas las imágenes y elegirán las mejores.

Sagittarius A

En el centro de la galaxia de la Vía Láctea, se ubica el agujero negro supermasivo Sagitario A * (Sgr A *), ubicado en el medio, se revela en estas imágenes.

Los astrónomos han utilizado el Observatorio de rayos X Chandra de la NASA para dar un paso importante en la comprensión de por qué el material alrededor de Sgr A *, es extraordinariamente débil en los rayos X.

La emisión de rayos X difusa proviene del gas caliente capturado por el agujero negro y que se extrae hacia adentro. Este gas caliente se origina a partir de los vientos producidos por una distribución en forma de disco de estrellas jóvenes masivas observadas en observaciones infrarrojas.

¿Cómo nace un hoyo negro?

De acuerdo con Deborah Dultzin Kessler, del Instituto de Astronomía (IA) de la UNAM, existen dos tipos de hoyos negros:
Cuando una estrella masiva (10 veces la masa del Sol) explota se le conoce como supernova; su remanente, que debe ser mayor a tres masas solares, implosiona por la gravedad, lo que da como resultado un hoyo negro.

El segundo tipo es supermasivo, con un millón de veces la masa del Sol, y se ubica en los núcleos de las galaxias, como la nuestra. Se desconoce su origen.

LEG